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Llull: "Me he destapado, pero tengo que mejorar"

  • El escolta del Real Madrid se ha convertido en la sorpresa de la temporada
  • Su partidazo en la Euroliga ante el Barcelona fue crucial para la remontada
  • El derbi se repetirá en la Copa del Rey y Llull confía en que su equipo gane de nuevo

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Llull, el revulsivo del Madrid

Muchos empiezan a considerarlo como el "microondas", el nuevo revulsivo del Madrid, pero él afirma con humildad que es un escolta de 21 años que aún tiene mucho que mejorar. Lo cierto es que en esta temporada Sergio Llull se ha destapado. El que empezó como  tercer base de los blancos se hizo un hueco en el equipo aprovechando las bajas de Raúl López y Pepe Sánchez, y sus buenas actuaciones le han hecho ganarse la confianza de Joan Plaza.

Este menorquín de 1,90 metros de altura no quiere defraudar a los que promovieron su fichaje por el club blanco hace un año cuando, viendo en él a toda una promesa, se lo trajeron del Ricoh Manresa, que por aquel entonces militaba en la extinta liga LEB. "He sido del Madrid toda mi vida y no me lo pensé ni un segundo", afirma Llull.

Tras una primera temporada con el Madrid titubeante, este año se está consolidando, promediando 8,3 puntos por partido. Su último partido en la Euroliga ante el Barcelona, en el que anotó 18 puntos y fue el artífice de la remontada, dejó boquiabierto a más de uno.

El derbi se volverá a repetir en los cuartos de final de la Copa del Rey, partido en el que Sergio espera demostrar que lo suyo no fue flor de un día. ¿Cómo te sientes después de haber hecho un gran inicio de temporada  y de tu partidazo ante el Barcelona en la Euroliga?

R. La verdad es que estoy jugando mejor que nunca y que me encuentro muy bien. Las lesiones de Raúl y Pepe Sánchez me han beneficiado y me han permitido jugar más minutos y coger confianza. Además estoy anotando con facilidad.

¿Cómo valoras la victoria contra el Barcelona en la Euroliga, crees que fuiste el revulsivo del equipo?

R. Me alegro mucho por el partido que hice, pero sobre todo me alegro porque conseguimos remontar y derrotar al "coco"de la Euroliga. El Barcelona venía con el mejor expediente de la primera fase (De los diez partidos disputados, sólo perdió en el campo del Montepaschi) y además había ganado en dos ocasiones al todopoderoso Phanatinaikos (ganador de la Euroliga en 2007 y perenne candidato a llevarse el título continental).

Salimos muy flojos y, después de ir por debajo en el marcador durante todo el partido, conseguimos darle un vuelco al encuentro y terminar venciendo por 85-83.

¿Supone esta victoria un golpe moral para el próximo partido que vais a tener ante los azulgranas en los cuartos de final de la Copa del Rey?

R. No podemos levantar las campanas al vuelo. Un derbi siempre es un partido muy complicado. Parar a Juan Carlos Navarro será prioritario. En la Copa nos puede ayudar el factor cancha y lo que está claro es que con nuestra remontada hemos demostrado que podemos ganar a los mejores equipos.

¿Quién cree que es el favorito en la Copa del Rey?

R. Lo bonito de una competición como la Copa del Rey es que no hay favoritos. A un partido a vida o muerte puede ganar cualquiera. Es cierto que el TAU está jugando de miedo y que está haciendo una temporada magnífica, pero no hay que confiarse.

En la pasada temporada, nosotros empezamos muy fuertes tanto en la Liga como en la Euroliga. Parecía que nos íbamos a comer el mundo y al final no ganamos ningún título.

Si no cree que haya favoritos dígame, por lo menos, los jugadores que más le preocupan para la Copa.

R. Como ya he dicho antes, Juan Carlos Navarro. Ha estado en la NBA y eso se nota. Si está "enchufado" es muy difícil pararlo. Junto a él también temo muchísimo a Igor Rakocevic. (El escolta serbio ha sido el MVP de la Euroliga en enero y en la ACB promedia 21 puntos por partido).

Sin embargo, nosotros también contamos con superestrellas como Felipe Reyes o Raúl López.

¿Se ve en la selección?

R. Soy un jugador joven que aún tiene muchos aspectos que mejorar. Recibir la llamada del combinado español es un sueño, pero la selección tiene un bloque muy unido y es difícil entrar. Hay fueras de serie como Sergio Rodríguez o Carlos Cabezas que, pese a no estar en los Juegos de Pekín, tienen gran calidad.