El balón obró el milagro de Adebayor

• El delantero del Arsenal no empezó a caminar hasta los cuatro años
• Un balón perdido hizo que moviera las piernas por primera vez
• Su madre, preocupada, había visitado a varios especialistas

Adebayor es un hombre de profundas creencias religiosas desde que conoció su historia.

Emmanuel Adebayor lo recuerda con una sonrisa, pero para su madre fue un milagro. Un balón fue el que predestinó el futuro del delantero del Arsenal cuando a los cuatro años le obligó a andar por primera vez en su vida. Y, además, fue dentro de una iglesia; sólo faltó que el balón tuviera voz propia y le dijera: "Emmanuel, levántate y... chuta".

Adebayor lo contó a la cadena oficial de su club, Arsenal TV: "Es una historia increíble, pero es cierta. Mi madre me la ha contado toda mi vida". 

El pequeño Emmanuel estaba tumbado en la iglesia mientras su madre y otros familiares rezaban por él. Fuera, unos niños jugaban y el balón entró en la iglesia en uno de los lances. De repente, él se levantó y corrió hacia el balón, "porque quería cogerlo", así de sencillo.

Su madre se sobresaltó y la gente que estaba alrededor empezó a decirle: "Tu hijo anda gracias al fútbol. Eso debe ser porque el chico tiene el fútbol en sus venas". Ahí acabaron cuatro años de calvarío para la señora Adebayor, preocupada por la extraña anomalía de su hijo.

"Mi madre me llevó por Nigeria, Lagos, Ghana y todas las ciudades de África, pero nada pasaba", asegura el delantero togolés. Pero todo cambió aquella mañana y, desde entonces, Emmanuel agradece ser quien es a Dios: "Todo lo que hago en la vida lo pongo en manos de Dios, mi creador".

"Hace ocho años ganaba unos peniques. Sé lo que es no tener nada. Sé de dónde vengo y siempre lo recordaré", asegura Adebayor sobre sus místicos orígenes.