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Hiddink, camino a Londres

  • La Federación rusa da su visto bueno a la marcha de su seleccionador a Londres
  • El actual seleccionador de Rusia tiene una buena relación con el dueño, Roman Abramovich
  • El holandés se ofrece para entrenar al Chelsea hasta fin de temporada sin dejar la selección

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La Federación Rusa de Fútbol (RFU) ha dado su visto bueno a que el Chelsea negocie con Guus Hiddink para que sea el sustituto de Luiz Felipe Scolari en el banquillo del club inglés hasta final de temporada.

Así lo ha anunciado la RFU en su web, horas después de que lo hiciera el club de Stamford Bridge, por lo que ya sólo resta el acuerdo entre el Chelsea y el actual seleccionador ruso, quien se había ofrecido personalmente a Roman Abramovich.

El calendario de la selección rusa, según el comunicado, "permite a Guus (Hiddink) compatibilizar ambos cargos".

El Chelsea se ha apresurado en encontrar un nuevo entrenador que sustituya al destituido Luiz Felipe Scolari, y uno de los primeros con los que ha contactado es el actual seleccionador ruso como el propio Abramovich admitió.

"Tengo que reconocer que es una situacion complicada que afecta a la selección nacional rusa y al Chelsea", dijo el técnico desde su residencia de vacaciones en el Mediterráneo. "Se trata de una situación excepcional. Si se tratara de cualquier otro club, mi respuesta sería un "no" rotundo", añadió el holandés, que mantiene una buena relación personal con el presidente del Chelsea, el magnate ruso Roman Abramovich.

"El Chelsea es diferente, y me gustaría ayudarle si pudiera. Pero sólo sería posible en los próximos dos o tres meses, hasta el final de la temporada", explica Hiddink.

Experiencia en dos banquillos a la vez

No sería la primera vez que combina dos banquillos, como recuerda el propio Hiddink. "Ya lo hice hace un par de años cuando entrenaba a la selección de Australia y al PSV Eindhoven, así que ya estoy familiarizado con esa situación y lo que ello conlleva", explica, a la vez que deja claro que en ningún momento estaría dispuesto a dejar en la estacada a la selección rusa.

"No dejaré mi trabajo con el equipo nacional ruso. Eso está fuera de toda duda. Cuando acepté el puesto fue para un proyecto a largo plazo y no quiero dejarlo sin concluir", zanjó.