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El Atleti empata ante el Oporto con un juego pobre

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Forlán ha sido el jugador más decidido de los rojiblancos.
Forlán ha sido el jugador más decidido de los rojiblancos.

El Atlético de Madrid no pasa del empate en casa ante el Oporto, con la inestimable ayuda del portero portugués, (2-2). Los atléticos tendrán que esperar a la vuelta en Portugal para resolver la eliminatoria.

Los rojiblancos han salido al Calderón a especular con el balón y eso les ha pasado factura ante un buen Oporto. Los portugueses han tenido mucha más profundidad en el juego y han sido más ambiciosos que los madrileños.

En Europa no se puede salir a ver que pasa, y eso es lo que ha hecho exactamente el Atlético de Madrid. Sin control en el centro del campo y con una defensa horrible (sólo se ha salvado Leo Franco) es imposible hacer algo en la Champions.

El árbitro pitaba el comienzo del partido y el juego errático del Atleti no se hacía esperar. Desde el minuto uno comenzaron los rojiblanco a dar una de cal y otra de arena.

Apenas se llevaba un minuto del partido cuando los de Abel daban la primera de cal. El delantero del Oporto, Hulk, se llevó un balón por la banda haciendo un lío a la defensa rojiblanca, para ponérsela a Rodríguez que falló por muy poco.

En la siguiente Agüero demostró que la paternidad le ha sentado bien, se llevó el esférico por el interior del campo, dando un pase raso al segundo palo al que llegó Maxi desde atrás para subir al luminoso el primer tanto.

A partir del 1-0 los colchoneros desaparecieron del partido, replegaron líneas y los portugueses se hicieron con el control absoluto de la bola.

Como se suele decir, la realidad supera a la ficción. Así lo demostró el 'incríble' Hulk, un portento físico y de velocidad, que una y otra vez hacía estragos en la retaguardia de los de Abel.

Sólo un disparo desde la frontal del área de Forlán, que despejó Helton, inquietó a los portugueses.

Sin control en el centro del campo

El Atlético no controlaba el juego en el centro del campo y los portugueses empezaban a pasearse por el Calderón, era cuestión de tiempo el empate luso, así llegó el primer susto serio para los madrileños. Jugada ensayada del Oporto que termina con un gol anulado por fuera de juego a Lisandro.

El Atleti seguía replegado y sin ideas, el Oporto seguía a lo suyo y Leo Franco salvando los platos rotos de los colchoneros. Hulk se quedaba mano a mano con el guardameta rojiblanco y Leo agunató muy bien para despejar el balón.

El empate estaba a punto de llegar, una bola sacada por la defensa de los madrileños acabó en un pase de cabeza desde el centro del campo de Meireles, al que no llegó a despejar Pablo, para que Lisandro se quedase delante de Leo Franco que a pesar de tocar el balón no pudo hacer nada para evitar el 1-1.

Los portugueses estaban jugando mucho mejor que el conjunto español. El segundo gol del Oporto se olía en el aire.

Cunado apenas quedaba unos segundos para llegar al descanso, Forlán chutó el balón desde fuera del área, que puso el 2-1 con la colaboración inestimable del portero portugués.

Más de lo mismo

Abel debió hablar con sus jugadores en el vestuario, porque los madrileños salieron al campo más asentados, a pesar de que en los primeros minutos de la segunda parte, los portugueses estuvieron a punto de empatar en un córner.

El técnico rojiblanco decidió sacar del campo a Agüero para meter a Pongolle, algo que no sentó muy bien ni al jugador ni a la afición colchonera, que respondieron con pitos a la decisión de Abel.

Los madrileños ganaron control en el juego y estaban más asentados en defensa, un tiro desde la frontal del área de Raúl García casi acaba con el tercero del Atleti.

Abel seguía sin ver las cosas claras y cambió a Raúl García por Maniche, para darle más profundidad al juego de ataque de los del Manzanares.

Cunado mejor estaban jugando los madrileños, dieron otra de cal. Cissokho se fue por la derecha y puso un pase perfecto para que Lisandro, de nuevo, pusiera la tablas en el marcador en el minuto 72. (Máximo goleador de la Champions con seis goles).

Y vuelta a empezar para el Atlético. Los minutos pasaban con el balón en los pies de los atléticos, pero el gol no llegaba. Los portugueses estaban satisfechos con el resultado y bajaron los brazos.

El Atlético ha mostrado un juego pobre y raquítico, los madrileños tendrán que resolver la eliminatoria en Portugal, aunque como no mejoren mucho la clasificación está muy complicada.