Michael Albasini se lleva la cuarta etapa
- El suizo se ha impuesto al sprint en los últimos 150 metros
- Vandevelde y Van den Broeck han sido segundo y tercero respectivamente
- Sigue la Vuelta al País Vasco por Teledeporte y RTVE.es
El Michael Albasini (Team Columbia-High Road) se ha impuesto en la cuarta etapa de la Vuelta al País Vasco, Eibar (Guipúzcoa)-Güeñes (Vizcaya), a modo de corredor de pista en un sprint de tres corredores en el que ha superado a sus compañeros de escapada Christian Vandevelde (Garmin-Slipstream) y Jurgen Van den Broeck (Silence-Lotto).
Si el desenlace final de la jornada no era el más atractivo de los esperados, es decir, una escapada de corredores sin peligro para la general y no demasiado conocidos para el gran público, el kilómetros y medio final que han ofrecido los fugados si ha merecido la pena.
Después de haberse entendido muy bien durante toda la etapa, a excepción de un ataque de Valdevelde en la última subida del día, en el alto de Beci, a 33 kms. de meta, abrió las hostilidades Van den Broeck y contraatacó Albasini.
En vista de que ninguno lograba marcharse, los tres corredores se pararon e iniciaron la habitual liturgia de una prueba en pista, casi parados y mirándose constantemente uno a otro. En cuanto vieron la pancarta de meta, arrancaron todos al unísono y Albasini, ya a priori el más rápido de los tres, ganó sin discusión.
Todo el mundo daba por hecho que la etapa iba a estar marcada por una escapada de hombres sin opciones en la general y se formó pronto, casi de inmediato a la salida. Fue en el km.6, una vez que se superó el alto de Areitio, de terceras, el primero de los siete puertos que han tenido que superar los corredores.
La conformaron Christian Vandevelde (Garmin-Slipstream), José Arrieta (AG2R), Ricardo Serrano (Fuji-Servetto), Michael Albasini (Team Columbia), Jurgen Van den Broeck (Silence-Lotto) y Philip Deignan (Cervelo), aunque Arrieta y Serrano cedieron las rampas de Urkiola, una de las cuatro subidas de primera categoría de la carrera, si bien demasiado lejos de meta, a 132 kms.
No obstante, el legendario puerto vizcaíno no podía pasar desapercibido y en sus rampas hubo movimiento. Aparecieron el segundo clasificado en la general, Samuel Sánchez, y también el que fuera líder las dos primeras etapas, Luis León Sánchez, pero Alberto Contador no volvió la cara.
Aunque las escaramuzas no tuvieron continuidad, el Astaná salió debilitado de ellas, ya que Chris Horner, el gran aliado del de Pinto en Arrate, cayó terminándose el descenso y tuvo que abandonar. Además del estadounidense, se fue al suelo también su compañero Dani Navarro, que, como consecuencia de ello, estuvo toda la etapa con problemas físicos y retrasado.
Según explicó el director del Caisse d'Epargne, Luisle se paró "por respeto" a la caída del norteamericano, con quien acababa de compartir una escapada en la que también estaban Junama Garate (Rabobank), Roman Kreuziger (Liquigas) y Dario Cataldo (Fuji-Servetto).
El corredor del equipo de Joxean Fernández Matxin sí continuó por delante del pelotón en busca de los primeros, pero no logró cazarles.
Por delante, los fugados fueron ampliando diferencias hasta alcanzar una máxima de 7:54 en el km.85. Ante tal ventaja, el gran grupo se lo tomó con calma y dejó el triunfo de etapa para los que se lo estaban trabajando, entre los que Deignan cedió subiendo el último alto puntuable, el de Beci (a 33 kms. de meta), tras un ataque de Vandevelde.
De ahí al final de etapa, el pelotón se limitó a impedir demasiada ventaja de los escapados y éstos a llegar con tiempo de disputarse la etapa sin agobios por detrás. Lo consiguieron y Albasini, el más rápido de los tres, se llevó el triunfo en un esprint casi más de pista que de carretera.