El Villarreal sale de Londres tocado y hundido
- Los de Wenger han sido superiores al Villarreal desde el minuto uno (3-0)
- Cesc ha vuelto a demostrar por qué es el capitán de los 'gunners'
- Los de Pellegrini han mostrado su peor cara de la temporada en el peor momento
- Al final el Villarreal ha salido goleado en el computo global de la eliminatoria (4-1)
- Todos los datos del partido
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El Villarreal se despide de su sueño europeo con una dolorosa derrota en el 'Emirates Stadium' ante el Arsenal (3-0). Los de Pellegrini no han dado la talla y han mostrado la peor versión de la temporada del 'submarino amarillo'.
Los castellonenses salieron al partido sin la ambición necesaria que se necesita para levantar una eliminatoria que tenían a tiro. Las imprecisiones y el miedo escénico se ha apoderado de Pellegrini y sus chicos, lo que les ha condenado al abismo de la eliminación.
El adiós del Villarreal ha desequilibrado la balanza en favor de los equipo ingleses. Chelsea, Arsenal y Manchester están entre los cuatro mejores equipos de Europa, ahora sólo el Barça puede acabar con la hegemonía de la Premier.
Desde que pitó el árbitro el comienzo del partido, el Villarreal dio síntomas de no ser el mismo de siempre, muchas imprecisiones y falta de control en el balón. Sin apenas tiempo para entrar en ambiente, Cesc le puso un pase interior a Adebayor, al que no llegó porque no se lo esperaba. El catalán amagó para engañar a Diego López y termino confundiendo a su propio compañero.
El Arsenal mostraba desde el minuto uno que quería el partido y el gusto por el juego de toque. Aunque no es de extrañar teniendo a Cesc como director de orquesta, así cualquier sinfonía suena bien. Los ataques constantes de los 'gunners' combinado con las imprecisiones en defensa de un tímido Villarreal, hacían preveer un gol de los de Wenger en cualquier momento.
Y así fue, tan sólo hubo que esperar diez minutos para que el 'mago' Cesc se sacara de la chistera un pase de tacón que dejó solo a Walcott, que batió al Diego López con un gran remate picado. A pesar del gol, los de Pellegrini seguían teniendo las cosas no demasiado mal, ya que les hacía falta un único tanto para empatar la eliminatoria, pero lejos de ir a por el partido, al equipo de Pellegrini le daba miedo controlar el balón.
Gonzalo era un ejemplo del nerviosismo que reinaba en el Villarreal. El central , otras veces salvador, no dejaba de meter la pata una y otra vez, el único que se salvaba hasta el momento era Rossi, con sus desmarques, pero los balones no le llegaban.
La tónica de la primera mitad se resumia en una constante, el Arsenal atacando con un juego veloz y directo, mientras que el Villarreal intentaba defenderse como buenamente podía. Los 'gunners' eran peligrosos con el balón, pero también mostraron que si él son un equipo que sufre, factor que los de Pellegrini no estaban sabiendo aprovechar.
La mejor ocasión de los castellonenses llegó poco antes del final del primer tiempo, un córner rematado por Godín que se marchó por encima de la madera que defendía Fabianski.
El árbitro termina de hundir al Villarreal
Pellegrini ofrecía su cara más conservadora y en vez de cambiar la cara al equipo con la entrada del Nihat e Ibagaza desde el comienzo de la segunda mitad, el chileno se encogió por el miedo escénico.
Lejos de mejorar, los castellonenses seguían empeorando por minutos. La frescura de los 'jovencitos' del Arsenal estaba ganando a la experiencia de Pires. Las ocasiones de los 'gunners' seguían siendo constantes, el gol se olía en el 'Emirates Stadium'.
Y así fue, en otra jugada de velocidad de los londinenses llegó el segundo, pase cruzado de Van Persie a Adebayor, que no perdonó y mandó el balón al palo largo de la portería de Diego López.
Tras el 2-0, Pellegrini intentó solucionar el desastre, sacó a Ibagaza y Nihat, ya era un poco tarde. Por si fuera poco, en una de las peores noches europeas del Villarreal, el árbitro y el línea contribuyeron al hundimiento del 'submarino amarillo'.
El colegiado pitó un penalti inexistente de Godín sobre Walcott a instancias del línea. En medio de las protestas y para sumar un mal mayor, Eguren fue expulsado por portestar la polémica decisión. Van Persie no dudo y puso el 3-0, lo del Villarreal se convirtió en misión imposible.
El resto del partido fue un monólogo de los chicos de Wenger, Cesc seguía dirigiendo las incursiones de Van Persie y Adebayor, ante la impotente mirada de los castelloenenses que veían como se escapaba el sueño europeo.
Al Villarreal sólo le queda hacer borrón y cuenta nueva, para centrarse en la liga e intentar conseguir el cuarto puesto que da derecho a jugar la previa de la Champions.