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Bojan niega que haya "canguelo"

  • Asegura que irán al Bernabéu sin complejos
  • El canterano deplora el estilo de juego del Chelsea

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El canterano Bojan Krkic pugna de cabeza con el central Alex.
El canterano Bojan Krkic pugna de cabeza con el central Alex.

El delantero del FC Barcelona Bojan Krkic afirmó que "no" sienten "'canguelo'" por la presión que ejerce sobre ellos el Real Madrid, y aseguró que están "tranquilos" de cara al duelo en el Santiago Bernabéu porque, pase lo que pase, saldrán líderes.

Bojan aseguró que su equipo jugará "sin complejos" el próximo sábado en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid y con un planteamiento ofensivo, pese a sus dos últimos empates consecutivos, ante el Valencia en Liga (2-2) y el Chelsea (0-0) en la Liga de Campeones.

El atacante barcelonista reivindicó el crédito que se ha ganado su equipo a lo largo de la temporada. "Jugamos un partido cada tres días porque estamos vivos en las tres competiciones. Nos hemos merecido este respeto y hemos demostrado que estamos capacitados para ello", apuntó Bojan antes de prometer un Barcelona "sin complejos" en Chamartín.

"Vamos (al Bernabéu) con las ganas de hacer un buen partido. Sabemos que el Madrid te puede ganar en cualquier momento, pero nosotros jugaremos como lo hemos hecho hasta ahora. Con respeto, pero sabiendo que podemos sacar un buen resultado", comentó.

Bojan también destacó "que pase lo que pase" en el Bernabéu, "seguiremos siendo líderes y dependiendo de nosotros mismos" y reclamó que la afición siga apoyando a su equipo. "Me gustaría que la gente siga creyendo en nosotros. Creo que se puede seguir confiando en este equipo", indicó.

Protagonista del empate sin goles ante el Chelsea, por la ocasión que falló en un remate de cabeza a falta de pocos minutos para el final del partido, Bojan explicó que su única sensación es la de resignación. "Fue una lástima, pero ya no se puede hacer nada. Sólo quiero pensar en que la próxima, la meteré", deseó.

Bojan deploró el estilo defensivo que el Chelsea desplegó en el Camp Nou -"nos va mal, pero si a un equipo así le haces un gol rápido, acaba por abrirse"- y rebajó la indignación que el vestuario del Barça expresó con el árbitro al término del partido. "No creo que tengan mala fe, se pueden equivocar, pero si nosotros hacemos las cosas bien, no tenemos que depender de los árbitros". También confesó que si hubiese convertido su ocasión de gol, "no hablaríamos del árbitro".

El jugador del Barcelona también lamentó la lesión de su compañero Rafa Márquez, que estará entre ocho y diez semanas de baja por una rotura de menisco. "Ha sido una lástima porque se trata de un jugador muy importante, pero tenemos que creer en los jugadores que tenemos", explicó.