Los Rockets cambian el guión a los Lakers
- El equipo de Pau Gasol ha perdido en Los Ángeles 100-92
- Todos los datos del primer partido de la semifinal de conferencia
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De nada sirvió que los Lakers arrasaran a los Rockets de Houston durante la temporada regular, puesto que en el momento decisivo, cuando de verdad valen las victorias, el conjunto tejano dio una ejemplar imagen de solidez (92-100) ante los californianos, desconocidos en muchas fases del duelo. [Clasificación de los "Playoffs"]
El primer punto de las semifinales de la Conferencia Oeste se lo llevaron los Rockets gracias al impresionante despliegue del pívot Yao Ming (28 puntos y 10 rebotes), el escolta Ron Artest (21 puntos y siete asistencias) y el base Aaron Brooks (19 puntos).
En los Lakers sólo se salvó -y gracias a una inspirada segunda mitad- Kobe Bryant, autor de 32 puntos en una serie de 14/31, en tanto que Pau Gasol firmó una discreta actuación, a pesar de su doble-doble (14 puntos y 13 rebotes).
Ritmo pausado, defensa exigente al máximo y acertada elección en el tiro. Con esas sencillas armas, los Rockets desarbolaron al principal contendiente de la Conferencia Oeste, que debe exigir mucho más a algunas de sus piezas fundamentales, titulares como Andrew Bynum y suplentes como Sasha Vujacic.
Sin apenas tiempo para el duelo entre Ming y el joven Bynum -éste cometió dos faltas en dos minutos y fue sustituido por Lamar Odom-, ambos conjuntos se combinaron para fallar diez de los primeros 16 lanzamientos a canasta. Los nervios ganaban la partida a la precisión.
En ese escenario de juego trabado y antiestético, destacó la defensa de Gasol sobre Ming y las acciones ofensivas de Ron Artest, en su salsa mientras la afición angelina la tomaba con él. Los Rockets sacaron petróleo del despiste de los Lakers y dominaron el primer cuarto (12-19, m.9).
Una semana sin jugar (el último partido para el equipo de Phil Jackson fue el 27 de abril) ofrece tiempo de descanso para una plantilla, aunque también corta el ritmo de competición.
El paréntesis pasó factura a los Lakers y cerraron el primer cuarto con un 33 por ciento en el tiro, una situación que no mejoró mucho a lo largo del segundo periodo (26-34, m.18) a pesar de que Trevor Ariza intentó suplir la falta de protagonismo y desacierto de Bryant, que el domingo no entrenó por una faringitis.
Sin embargo, el líder angelino, a pesar de fallar ocho de sus doce tiros, clavó una suspensión en el último segundo de la primera parte para acercar a los suyos (40-43), un resultado que no hacía justicia a la manifiesta superioridad del equipo de Rick Adelman.
Los tejanos volvieron a la pista con el mismo furor y registraron la máxima ventaja hasta entonces (40-49), pero justo después, cuando parecía que Houston podía poner tierra de por medio, llegó un parcial de 8-0 para los californianos, gracias a unos letales Bynum y Ariza.
Pero nada parecía ser suficiente para que los Lakers dieran la vuelta a las cosas. Los Rockets, de la mano de un genial Aaron Brooks, volvieron a ponerse nueve arriba (50-59), lo que encendió definitivamente la luz de emergencia de Bryant, que anotó 13 puntos en este cuarto.
El 24 angelino sacó el rifle y recibió un soplo de aire fresco en forma de triple sobre la bocina firmado por Jordan Farmar (67-70), en sus primeros segundos sobre la cancha. Con todo por decidir, ambos equipos se encomendaron a sus primeras espadas.
Apareció Gasol con un mate a pase de Odom. Después Bryant con una entrada a canasta a pesar de la pegajosa defensa de Artest. Y finalmente, un secundario de lujo, Shannon Brown, puso de nuevo por delante a los Lakers desde la línea de tiros libres (77-76, m.35).
Pero los Rockets no se arredraron. Aguantaron de forma estoica la reacción local y gracias al trío formado por Ming, Artest y Brooks, inmensos a ambos lados de la pista, materializaron una victoria con la que pocos contaban antes de dar comienzo la eliminatoria.