Los tatuajes de la suerte y los amuletos
- El trasero de Beckham se convirtió en el amuleto del Milan cuando el inglés llegó a San Siro
- Probablemente Dani Güiza sea el jugador español que más cree en la suerte
La suerte a veces se puede buscar en una parte del cuerpo, propia o de un compañero, si no que le pregunten a Beckham en su etapa en el Milán. Su llegada coincidió con una racha de imbatibilidad de los 'rossoneri'; y, como un exclusivo 'búho de la suerte', sus compañeros se acostumbraron a tocar el trasero del medio inglés porque lo veían como una mascota de la suerte.
Aunque pretenden disimularlos, existen los amuletos sin los que alguno se siente perdido. Cañizares por ejemplo siempre llevaba su famosa toalla que dejaba detrás de la portería, en una ocasión se la robaron y el enfado del guardameta del Valencia fue monumental.
El capitán del Arsenal, Cesc Fábregas, afirma no ser supersticioso, pero en muchos partidos llevaba un anillo que le regaló su novia, siempre le daba 4 besos. Igual que el catalán, Reyes siempre juega con un anillo que le es muy especial al utrerano. Por no hablar del famoso beso al anillo que ha hecho famoso Raúl González.
Los tatuajes se han convertido en el mejor método de llevar consigo el amuleto de manera legal para los árbitros. Unos se tatúan el número preferido, como el 4 de S. Ramos o las letras chinas de la suerte, que le pregunten a Guti.
Probablemente uno de los jugadores, que disputarán la Champions League, más supersticioso es Dani Güiza. Nunca falta su Cristo de los gitanos, el presinarse y un cuidado método de entrada al campo, a tal punto llega su creencia que evita hablar de ello porque le puede dar mala suerte.