Serbia sorprende a España
- Los chicos de oro no han brillado ante una renovada Serbia (66-57)
- La selección de Scariolo ha fallado desde la línea de tres y en el rebote
- España ha despertado en el último cuarto, pero no sirvió para remontar
- Felipe Reyes ha sido el mejor jugador de la selección española y Krstie del partido
- Gasol ha reconocido el mal juego que han realizado ante los serbios
- Todos los datos del partido
España es la gran favorita para hacerse con el Eurobasket de Polonia, pero en el primer partido ante una renovada Serbia han mostrado sus carencias y comienzan con una dolorosa derrota (66-57). España ha estado muy fallona desde la línea de tres y se ha echado de menos ese juego rápido y fresco que caracteriza a este equipo.
Los serbios han mostrado, que a pesar de ser un equipo joven y sin sus jugadores importante, son serios candidatos para hacerse con el oro en la final de Polonia.
Los hermanos Gasol no han tenido su mejor partido. Marc ha estado muy ansioso y poco acertado debajo del aro, mientras que ha Pau se le ha notado en exceso la falta de ritmo y confianza, con un porcentaje muy bajo de tiros libres, algo extraordinario en el juego del mayor de los hermanos.
El mejor jugador de los españoles ha sido Felipe Reyes, en 13 minutos ha anotado 12 puntos y ha recogido 6 rebotes, muy buenos números para el jugador del Real Madrid. Por parte de los serbios, su jugador estrella ha sido Krstie de 26 años y el más veterano de una selección que promete hacer historia.
Nada funcionaba en 'la Roja'. Desde el tiro de tres (0/10 a la media parte), pasando por la circulación de balón, ofuscada al máximo, y llegando hasta el nivel defensivo, insuficiente para poder desplegar el anhelado en transición.
Con Navarro errático y el resto desaparecido, España se agarraba como a un clavo ardiendo a la vuelta de Pau Gasol, eficiente como siempre pese a disputar sus primeros minutos este verano. Sin embargo, los aportes del jugador de los Lakers eran insuficientes para aguantar el envite del rival.
Y lo eran porque Serbia, el bloque más joven del campeonato, adquiría hábitos de gran equipo. Con el sello particular de Ivkovic, los balcánicos presentaban una dura defensa, buscando el contacto, encomendándose al innato talento individual de sus hombres en ataque.
Así, con Milenko Tepic al mando desde el perímetro, bien secundado por Velikovic y Krstic en la 'pintura', Serbia se creía con el paso de los minutos que el 'milagro' de tumbar al 'ogro' era más que posible (36-20, min.18).
Intento de reacción, pero sin éxito
La reanudación no alteró el panorama. España estaba perdida en defensa y seguía sin encontrar sensación alguna en la parcela ofensiva. Krstic se agigantaba en la zona y el combinado nacional asistía impotente a su propio funeral.
Cuando todo parecía perdido, irrumpió Navarro. El de Sant Feliu, muy desacertado el primer acto, anotó -al duodécimo intento- el primer triple para España y lideró la aparente reacción. Una reacción que, sin embargo, no se consumó.
Los pupilos de Scariolo encajaron un contundente 10-0 con el que concluían el tercer período, tocando fondo y aniquilando cualquier esperanza de resurrección.
Tras el varapalo, segundo consecutivo tras el 'aviso' en Lituania, España vuelve definitivamente al mundo terrenal, del que nunca debió salir, y desde el que deberá comenzar a edificar -comenzando mañana ante Gran Bretaña- su acecho a las medallas. Un sueño que, siendo muy posible, aún no es real.