El Getafe agudiza la crisis 'ché'
- Victoria del Getafe (3-1) ante el Valencia
- Manu remontó en pocos minutos el gol inicial de Villa
- Pedro León cerró la goleada con un soberbio saque de falta
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El Getafe devolvió la sonrisa al Coliseum Alfonso Pérez con una merecida victoria ante el Valencia (3-1), pese al gol inicial de David Villa, que empata en el 'pichichi' con Cristiano Ronaldo y Messi.
La afición azulona pudo ver por fin el premio al buen fútbol que propone el equipo de Míchel, después del chasco del primer partido en casa. Pero, claro, es que entonces el que estaba delante era el Barça.
De paso, los getafenses agravan un poco más la crisis del Valencia. El equipo 'ché' ya venía 'calentito' después de ceder un empate en casa ante el Sporting y las declaraciones posteriores de Villa, poniendo en solfa la estrategia de Unai Emery.
Y eso que fue el 'Guaje' el encargado de abrir el marcador (22') después de una buena internada de Joaquín. El gol no hacía justicia a lo visto hasta el momento, aunque tampoco atacaba con demasiada convicción el Getafe.
Sin embargo, lo que son las cosas, el gol pareció despertar a los locales, que se fueron hacia la portería de Moyà con la convicción del que tiene poco que perder y mucho que ganar.
Ahí apareció Manu del Moral, bigoleador, y héroe de la fulminante remontada del Getafe. En menos de dos minutos anuló la ventaja valencianista tras fusilar una asistencia de Casquero. Éste, para añadir épica a la jugada, recibió el pase del extremo Gavilán, quien había perdido su bota derecha.
Después de unos minutos algo trabados, de tanteo, un saque de esquina sirvió para presentar al protagonista del segundo acto en la función: Pedro León. El ex centrocampista del Valladolid está dando la razón a quienes confiaron en su fichaje, demostrando que tiene un guante en la pierna derecha.
No obstante, en el córner que supuso el segundo de Manu (38') colaboró más la defensa rival que Pedro. El balón llegó franco a la cabeza del delantero azulón, que marcó con algo de suspense, puesto que el balón no llegó a botar dentro de la portería.
Un Valencia volcado, pero sin criterio, y un Getafe que se gustaba al contraataque fue el guión de la segunda parte.
Los de Míchel pudieron endosar una goleada más que sonrojante a los de su colega Emery, pero se conformaron con deleitar a la grada con el soberbio lanzamiento de falta directa de Pedro León. Acto tercero, planteamiento, nudo y desenlace.
Bien podrían haber pedido que se bajara el telón, sobre todo los valencianistas. No les salía una a derechas e, incluso, Villa fallaba un remate casi a placer con la cabeza para maquillar el resultado.
En cambio, la grada de Getafe pedía los tradicionales bises a los primeros actores de la obra. Otra falta de Pedro León, un par de ocasiones de Manu, Gavilán, Casquero y Adrián -en momentos así se puede decir que es el hijo del 'jefe' Míchel- podrían haber hundido del todo la moral de un Valencia, que ahora debe curar sus heridas en Mestalla ante el Atlético de Madrid; duelo de necesitados.