Zapatero y los Reyes se reunirán con cerca de 40 miembros del Comité Olímpico Internacional
- La delegación, más arropada que nunca, celebra la llegada de sus últimos miembros
- La rueda de prensa ha sido interrumpida por una caluroso aplauso a Samaranch
- Gallardón ha vuelto a restar importancia a la presencia de Obama en Copenhague
- Ha pedido a los medios que informen de las virtudes de la candidatura Madrid 2016
- Toda la última hora sobre Madrid 2016, en nuestro especial
Ganar un aliado, ganar un voto. Así se plantea la candidatura de Madrid las últimas horas de presión ante la inminente votación del COI sobre la sede olímpica para 2016. De ahí el hecho de que los Reyes, que llegaron este jueves a primera hora de la tarde a Copenhague, y José Luis Rodríguez Zapatero, algo más rezagado en unirse a la carrera, vayan a reunirse en busca de apoyos para la votación del COI con cerca de 40 miemrbos del COI, según ha podido saber María Escario.
Fue precisamente así, con contactos bilaterales, como Tony Blair obtuvo los juegos para Londres 2012 en Singapur y ésa es la técnica que quieren llevar a la práctica desde la candidatura española.
En una esceonagrafia cuidada en un lujoso salón del hotel D'Anglaterre, sede de Madrid 2016 y lugar donde se alojan los Reyes y el presidente del Gobierno, Gallardón ha dado una multitudinaria rueda de prensa para agradecer la llegada del grueso de la delegación, los cerca de 400 miembros de la delegación que arropan ya la propuesta de la capital de España.
"Jugando en casa y con el público a favor". Así ha descrito el secretario de Estado del Deporte, Jaime Lissavetzky, sus sensaciones al ver abarrotado el salón, después de vivir en "soledad" los primeros días de esta etapa final de la 'carrera olímpica'.
Gallardón ha utilizado palabras como "convicción" o "absoluta seguridad" para describir su estado de ánimo a 48 horas de la decisión final.
Ovación a Samaranch
"Me gustaría que habláramos todos, pero parece que por mucho que nos guste hablar, los políticos hoy no lo vamos a hacer", en referencia a Esperanza Aguirre, quien en un primer momento ha declinado el ofrecimiento con un "tú hablas muy bien, Alberto".
Don de lenguas ha demostrado Mercedes Coghen, la consejera delegada, al ser preguntada en inglés y en voz muy bajita. Ante la incapacidad de escucharle Gallardón le ha explicado al periodista estadounidense que había preguntado: "No es que no entendamos el inglés, es que no le oímos", le ha dicho al periodista americano.
Coghen, en su faceta de digna conocedora de la lengua de Shakespeare, ha sido la encargada de pedir disculpas públicamente a Río de Janeiro por unas afirmaciones del vicepresidente del Comité Olímpico Español (COE), José María Odriozola, en las que decía: "Río es la peor rival".
La rueda de prensa se ha visto interrumpida con la llegada del presidente de honor del COI, Juan Antonio Samaranch, recibido con un caluroso aplauso a petición del alcalde.
"Intentamos ser tus alumnos, conseguir que tu legado en el COI tenga una continuidad en los JJ.OO de Madrid 2016", le ha dicho Gallardón a Samaranch.
Pide a los medios que informen de Madrid 2016
El alcalde ha pedido a los medios que "cuenten lo espléndidas que son las otras candidaturas para que se llegue a entender porqué la nuestra es incluso mejor".
Lissavetzky, a quien poco antes de comenzar la rueda de prensa se le ha podido ver sentado en el estrado y con los brazos caídos -mejoró el gesto en cuanto se supo objeto de los fotógrafos-, ha pedido el reconocimiento que nuestros deportistas y sus logros merecen dentro de esta "fortísima candidatura".
"No vamos a cejar hasta el último momento, es una carrera dura pero la vamos a ganar", asegura Lissavetzky.
Gallardón, lejos de reconocer el temor que causa la presencia de Obama en la presentación del viernes de Chicago, ha sostenido que esto "sólo pone en valor la importancia que los JJ.OO tienen para una ciudad". Y con un enérgico "el Txistu nos espera" ha cerrado el turno de preguntas y ha invitado a los asistentes a acudir al cóctel de bienvenida que ofrece la candidatura a los miembros de la delegación.