Argentina, 18 partidos de purgatorio
Los argentinos se han clasificado con un gol de Bolatti en Uruguay (0-1)
- La albiceleste sólo ha logrado 8 triunfos en 18 partidos
- La etapa de Maradona en el banquillo ha consumido su 'aura divina'
La victoria ante Chile en Buenos Aires (Argentina) hace ya dos años por 2-0 no hacía presagiar el problemático camino de la albiceleste en la fase de clasificación para el Mundial 2010 de Sudáfrica.
Todo parecía indicar que los dos grandes clásicos del futbol sudamericano, Brasil y Argentina, tenían dos puestos asegurados de los cuatro que disputaban los equipos del continente y el equipo que entonces entrenaba Alfio Basile no tendría apuros para jugar su décimo Mundial consecutivo.
Pero a pesar de un duro camino, Maradona ha conseguido un billete directo al Mundial para su querida Argentina.
¿Por qué no ha brillado un grupo que ha contado en sus convocatorias con jugadores de la talla de los tres ya mencionados más Riquelme, Demichelis, los hermanos Milito, Mascherano o Zanetti, entre otros?
Una de las respuestas está en sus escasas victorias -8 de 18 partidos jugados- y de la pobre imagen del conjunto en ellas. Tras la lograda ante Chile, llegó la que endosaron a domicilio a Venezuela y un mes más tarde, otra vez en Buenos Aires, por 3-0 ante Bolivia. Entonces el guión parecía cumplirse.
Primer tropiezo en Colombia
El último partido de 2007 se jugó en Bogotá (Colombia), donde Argentina cayó ante la selección local por 2-1. Un tropiezo entonces asimilable, pero que fue el inicio de una mala racha en la que los de Basile encadenaron cuatro malos resultados más: cuatro empates seguidos.
Cierto que uno de ellos fue en Belo Horizonte (Brasil) ante el eterno rival carioca, pero no sentaron nada bien en Argentina los 'pinchazos' en casa ante selecciones de menor entidad como Ecuador y Paraguay.
El ambiente no era el mejor para Basile cuando llegó un choque crucial ante un rival histórico, Uruguay. Era el 13 de octubre de 2008 y la pareja de moda en Argentina, Messi y el 'Kun' Agüero, daban la victoria a los suyos en un partido bastante bronco. Messi llegó a quejarse amargamente de la dureza de la defensa uruguaya, en la que formaban dos conocidos como Martín Cáceres y Diego Godín.
Los tres puntos suponían, además, un bálsamo para el maltrecho Basile, que aguantaba a la albiceleste en la tercera plaza, aún en puestos de Mundial.
Pero el fin del seleccionador llegó en Chile tres días después. Los 60.000 espectadores presentes en el Estadio Nacional de Santiago celebraron por todo lo alto el triunfo histórico de su selección (1-0), la chilena, ante Argentina; los antecedentes había que buscarlos en 1973. En el banquillo de los locales, para mayor inri, el argentino Marcelo Bielsa.
Llega Maradona
Basile dejó el cargo con elegancia y Argentina recibió con esperanza -y devoción- la elección de Diego Armando Maradona como nuevo seleccionador.
El nombramiento fue todo un 'boom' mediático mundial y toda una prueba de confianza para el ídolo de la albiceleste. Dada la dramática situación de Argentina en su grupo, se le dio además un tinte casi religioso.
Pero el devenir de la selección argentina con el 'Pelusa' en el banquillo no ha sido mucho mejor que con Basile. Nadie sabe con certeza cuáles son los conceptos futbolísticos de Maradona, aparte de decir que juega "con Messi y diez más".
Por otra parte, tampoco ha faltado la polémica con jugadores como Juan Román Riquelme, apartado de la selección, que poco a poco han ido minando la credibilidad del histórico '10'.
Maradona debutó en marzo de este año con victoria y goleada, ante Venezuela, pero encadenó derrotas dolorosas como la goleada (6-1) en Bolivia y la humillación a domicilio de Brasil (1-3) en Rosario. Entre medias, otras dos derrotas en Ecuador y Paraguay y sólo una victoria, ante Colombia en casa.
El gol de Palermo en el descuento ante Perú, con una lluvia torrencial, añadió algo de épica a la historia. Pero aún quedaba el último capítulo en Uruguay donde la albiceleste por fin despertó de la pesadilla.