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Aoyama impone su ley

  • El japonés reforzó su liderato al sumar su cuarta victoria del año
  • La foto finish decidió el segundo puesto de Barberá sobre Simoncelli
  • Álvaro Bautista se cayó y perdió el tercer puesto de la general

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Aoyama demostró que además de constancia, tiene arrojo.
Aoyama debutará en MotoGP.

Con la bandera de Japón ondeando sobre su cabeza, así, como un Sol Naciente, celebró Hiroshi Aoyama su victoria en Sepang, la cuarta en su curriculum esta temporada. El piloto del Honda Scot estuvo brillante, valiente, en una carrera en la que acabó batiendo, por calidad y cronómetro a su máximo rival, Marco Simoncelli.

A los que calificaron al nipón de balndo, tras su séptimo puesto en Australia, Hiroshi respondió sobre la pista. Entabló con Marco Simoncelli una durísima y bellísima - por su factura- batalla durante toda la carrera. Y salió ganador. Y sobre todo, reforzado, con una ventaja de 21 puntos en la general que le otorga en Valencia una oportunidad de oro para erigirse en campeón del mundo de 250cc. El último campeón del cuarto de litro.

Aoyama cuajó su victoria en las últimas cuatro vueltas, marcando vueltas rápidas y con récord del circuito incluído. Por detrás, ya a cuatro segundos, se quedaban Marco Simoncelli y Héctor Barberá. El valenciano, muy consistente, logró arrebatar el segundo puesto del podio al italiano en los últimos metros. No fue fácil. La foto-finish tuvo que entrar en acción.

Nueva caída de Bautista

Este podio de Barberá, unido a la caída de Álvaro Bautista (la segunda en las últimas tres carreras), aupó al de Dos Aguas a la tercera plaza de la general, en detrimento del de Talavera, ahora cuarto.

La carrera fue sublime y emocionante con Aoyama y Simoncelli entregándolo todo. Hasta cuatro adelantamientos consecutivos regalaron al público los dos rivales. Magníficos ambos, auqnue Simoncelli siempre conduciendo al límite. En un par de ocasiones envió a Aoyama fuera de la pista, aunque el japonés respondió con elegancia y efectividad.

Mala suerte para Jules Cluzel. El francés, que salía por primera vez este año desde la primera línea, lideró la carrera en sus cuatro primeras vueltas y se mantuvo entre los tres primeros en todo momento. Hasta que se cayó a diez vueltas para el final.

Idéntico destino vivió Álvaro Bautista, que dio con su moto en el asfalto en la sexta vuelta, cuando había remontado y rodaba en la cuarta plaza a un ritmo endiablado. El de Mapfre Aspar enterró de forma matemática sus opciones al título y cierra un año claramente frustrante.

Héctor Faubel fue quinto y Alex Debón, séptimo.