Sarkozy se disculpa por la mano de Henry
- El presidente francés pide disculpas ante el primer ministro irlandés
- Sin embargo, no apoya la repetición del partido Francia-Irlanda
- "Le dije a Brian Cowen que lo lamentaba, pero déjenme donde estoy"
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se disculpó con el primer ministro irlandés, Brian Cowen, por la controvertida victoria de Francia sobre Irlanda en su partido de repesca para clasificarse para el Mundial, pero descartó repetir el encuentro.
Cowen planteó esta posibilidad durante una cumbre de la Unión Europea en Bruselas, mientras que Sarkozy dijo que comprendía la posición de Irlanda, pero que no apoya esta petición.
"Le dije a Brian Cowen que lo lamentaba por ellos. Pero no me pidan que ocupe el lugar del árbitro, de las autoridades francesas de fútbol o de las autoridades europeas de fútbol: déjenme donde estoy, luego me acusan de estar en todos los frentes", expresó.
Antes, Cowen mostró su "apoyo" a la Asociación de Fútbol de Irlanda. "Nuestro ministro de Deportes escribirá a la FIFA para apoyar nuestra queja y buscar la repetición. Sarkozy entendería el sentimiento de decepción del pueblo irlandés tras el formidable partido", expresó después de que Francia lograra el pase tras empatar el partido en la prórroga tras un gol anotado por Gallas después de que Thierry Henry se llevara el balón con la mano.
También en Francia piden que se repita
En Francia también se alzan voces que piden la repetición del encuentro del pasado miércoles contra Irlanda.
“sería bueno que se volviera a jugar el partido“
La ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, se mostró tajante al asegurar que "sería bueno que se volviera a jugar el partido. Estoy muy contenta de que Francia esté en el Mundial, pero es muy triste haberse clasificado con esta trampa", afirmó la ministra. El primer ministro, François Fillon, aseguró que los Gobiernos no deben inmiscuirse en los asuntos de la FIFA.
“Más que orgullo, vergüenza“
En general, la clase política francesa se divide entre los que piden la repetición del encuentro y los que apelan a olvidar el incidente, aunque todos ellos coinciden en señalar que la clasificación para el Mundial les produce "más que orgullo, vergüenza".
Otras voces políticas se muestran menos tajantes. "En un mundo ideal el partido tendría que repetirse, pero no vivimos en un mundo ideal", afirmó el centrista François Bayrou.
Y ante la avalancha de críticas contra Henry, tachado de "tramposo hipócrita" en algunos medios, la ministra de Deportes salió en su defensa: "Nadie ha dicho que la mano fuera voluntaria".
Por encima del debate, la jugada ha reabierto el debate sobre la necesidad de introducir el vídeo en el arbitraje de los partidos de fútbol.
Una iniciativa a la que se opone el presidente de la UEFA, Michel Platini, un francés muy respetado en su país. Pero la mano de Henry ha llegado a manchar al ex futbolista. "Los franceses no tienen que sentirse incómodos con esa jugada. Bueno, uno sí, Platini, que siempre se ha opuesto al vídeo", aseguró el diputado conservado Fréderic Lefebvre.