El Atlante mexicano, primer obstáculo para el sexto título del Barça
- Barça y Atlante comparten color de equipación y un Rafa Marquez en el equipo
- El Estudiantes de la Plata ya espera rival en la final tras ganar al Pohang (2-1)
- Sigue en vivo el partido: 17:00 horas | Especial del Mundialito en RTVE.es
El FC Barcelona se estrena en el Mundialito contra el Atlante mexicano (En Vivo.17:00 horas) en las semifinales, con el firme objetivo de clasificarse para la final y cerrar así un año espectacular de éxitos, al que sólo le queda el título intercontinental.
El Estudiantes de la Plata ya espera al rival en la final del Mundialito, treinta y nueve años después de disputar su última final de la Copa Intercontinental, por el título de mejor equipo del Mundo, tras imponerse por 1-2 a un Pohang Steelers, que acabó el duelo con ocho jugadores y el delantero brasileño Denilson como portero.
La gran duda para el debut será el Balón de Oro, Leo Messi. Lo más probable es que el argentino inicie el partido en el banquillo y sólo saldría al césped si la cosa se pone muy mal.
Además de Messi, existe un interrogante acerca del estado físico de Seydou Keita, aquejado de unos problemas en los isquiotibiales, mientras que el resto de la plantilla estará a disposición del entrenador barcelonista, Josep Guardiola, para iniciar el asalto al sexto título del año. La zaga estará compuesta por Márquez y Puyol. Pedro sustituirá a Meesi en el ataque.
Esta es la tercera participación del Barcelona en la competición intercontinental, segunda en el actual formato. En 1992, el 'Dream Team' entrenado por Johann Cruyff perdió en la Copa Intercontinental ante el Sao Paulo brasileño (2-1), mientras que el 2006, tras conquistar la segunda Champions en París, volvieron a caer ante un carioca, el Sport Club Internacional, donde despuntó un jovencísimo Pato.
El equipo barcelonista llega a Abu Dabi con toda la tarea futbolística aprobada, haber obtenido la clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones, el pase a la siguiente ronda de la Copa del Rey y finalizar el 2009 como líder de la Liga. Un Barça invicto en Liga que está siendo hasta ahora el mejor equipo de la historia blaugrana.
El choque de semifinales entre el Barcelona y el Atlante es un partido inédito entre ambos clubes, que comparten colores (azul y grana) y una coincidencia: ambos cuentan con un mexicano en el equipo que se llama Rafa Márquez.
Los jugadores son conscientes de que no deberán confiarse ni darse por favoritos, pues el mensaje del técnico blaugrana, Josep Guardiola, seguro que acabará cuajando. Además, la actual plantilla quiere poner el broche de oro a la temporada del 'triplete', ya que el Mundialito les daría todavía más prestigio.
El capitán Carles Puyol haría historia al levantar el único trofeo que falta en las vitrinas culés, los recién llegados Ibrahimovic, Maxwell y Chygrynskiy serían partícipes del último título de la temporada y el canterano Pedro aspira a hacer historia al marcar, si lo consigue, en las seis competiciones en las que ha jugado en esta temporada. Milito, tras su larga lesión, podría volver a jugar oficialmente y, de hacerlo, estaría más que motivado.
'Los Potros de Hierro' de Cancún
Conocido como 'Los Potros de Hierro', el Atlante mexicano ya ha debutado en el presente mundial de clubes, en un partido muy cómodo ante el Auckland neozelandés, con victoria mexicana por 0-3, con goles de Arreola, Bermúdez y Silva.
Muy diferente será el partido que se encontrará el Atlante mañana en el estadio Zayed Sports City, ya que si alguna condición destaca el virtuosismo del equipo catalán es precisamente el control casi abusivo de la pelota.
El equipo que dirige José Guadalupe Cruz cuenta con un viejo conocido de la Liga española, el ex madridista Santiago Solari, aunque el conjunto mexicano también cuenta con futbolistas de elevado potencial, empezando por el portero, Federico Vilar, y continuando por el delantero Rafa Márquez, los centrocampistas Gabriel Pereyra y Christian Bermúdez o el defensa Daniel Arreola.
El Atlante, ubicado en Cancún, es el cuarto equipo mexicano que jugará el Mundial de Clubes, tras haber ganado la Liga de Campeones de la Concacaf al vencer al Cruz Azul. Su modesto objetivo en Abu Dabi pasa por igualar, como mínimo, el tercer lugar que obtuvo el Necaxa en la primera edición del Mundial de Clubes.