¿Y ahora qué, Pep?
- Después de entrar en la historia en su primer año, acaba contrato en junio
- En Inglaterra le ven como el más idóneo sucesor al trono de Ferguson
Esta es la pregunta que se hacen todos los culés. Si en cada aficionado blaugrana hay algún hueco que no lo ocupa la alegría y el orgullo, ese vacío lo ocupa la preocupación de ver cuanto tiempo aguantará Pep Guardiola a los mandos de la nave barcelonista.
Cuando acabó el partido de Abu Dabi, después de conseguir entrar en la historia y demostrar al mundo que era humano cuando se deshizo en lagrimas, Guardiola declaró en la sala de prensa del estadio Zayet Sports City que no se consideraba el rey del mundo, tan sólo una persona "extremadamente feliz y cansada".
Cansado... El técnico de Santpedor es un enfermo del fútbol, un hombre que dedica a su trabajo todas las horas de sol que tienen los días. Cuida todos los detalles, desde quienes deben acompañar a los jugadores en los viajes a cómo motivar a los suyos (un vídeo, una frase o una charla de un compañero que lleva dos años lesionado), pasando por analizar minuciosamente todos los aspectos tácticos del juego. Pero la pregunta es: ¿Cuánto tiempo puede aguantar una persona ese ritmo de trabajo por muy blaugrana que sea su sangre?
Laporta se ha marcado como objetivo, y poner así el broche de oro a su despedida, asegurar la continuidad de Guardiola. Sin embargo, el entrenador, que acaba contrato el 30 de junio, demuestra cautela como siempre y no quiere pronunciarse hasta que pasen las elecciones. Guardiola prefiere mantenerse al margen del proceso electoral y no verse involucrado.
Buscando una aparición en tierras árabes
Como un profeta en la península arábiga, Guardiola busca en Qatar una inspiración que le esclarezca su futuro. Pep se ha quedado unos días, acompañado por su familia, de vacaciones en Qatar (país en el que vivió dos años) hasta la víspera de Navidad que regresará a Santpedor.
En el emirato, Guardiola ha rogado que no se le pregunte sobre el Barça, quiere descansar para reflexionar. Pep Guardiola es una persona muy reservada, desde que se hizo con el puesto de entrenador no ha concedido ni una sola entrevista a un medio de comunicación. En las ruedas de prensa, de obligado cumplimiento el 'míster', nunca ha dicho una mala palabra y siempre ha sabido transmitir calma antes que euforia a los aficionados. Ejemplar siempre.
La Premier se ha fijado en él
De aquí a final de temporada las insinuaciones sobre su futuro se van a multiplicar. La revista 'Don Balón' asegura que el Manchester United hará todo lo posible para convertir a Guardiola en el heredero del trono de Ferguson.
Según esta información, los ingleses llevan meses estudiando los métodos de trabajo del entrenador catalán y destacan en él su estilo de juego y su capacidad para manejar un vestuario, como así demostró en los casos delicados de Messi con su selección o el de Eto'o.
Los 'diablos rojos' le extenderían un cheque en blanco en el que Pep sólo tendría que escribir las cifras y las peticiones para el cargo. La única condición que le impondrían sería la de decidirse antes de que acabe el próximo mes de abril.
La papeleta no sería fácil para nadie en la situación de Guardiola: continuar en el club de sus amores, al que llegó con 13 años y ha pasado de ser recogepelotas a ser el cerebro del mejor Barça de la historia, o el salir por la puerta grande para probar hacer historia en Inglaterra y ver el banquillo de la selección en el horizonte.
Su inseparable escudero, Tito Vilanova, si ha ampliado su contrato junto con el resto de sus colaboradores y por otro lado su gran amigo Manel Estiarte cree que Pep podría marcar una época en la Premier League y que es conveniente que se marche del Barça por la puerta grande.
En conclusión, siguiendo su filosofía y el estilo de su juego, Guardiola no se precipitará en la búsqueda del gol de la victoria y esperará la mejor y más adecuada ocasión para levantar su trofeo.