Verdasco se topará con Davydenko

• Verdasco pasa por abandono de su rival y se cruzará con Davydenko
• Serena Williams elimina a la última española, Carla Suárez (6-0 y 6-3)
• Federer ha derrotado a Montañés por 6-3, 6-4 y 6-4 y se sitúa en octavos
• Gran victoria de Almagro ante el colombiano Falla que le coloca en octavos

Fernando Verdasco pasó a octavos tras el abandono del austriaco Stefan Koubek.

La ley del número uno se ha impuesto por partida doble ante dos españoles, con victoria de la tenista estadounidense Serena Williams sobre Carla Suárez y la de Roger Federer ante Albert Montañés, en la tercera ronda del Abierto de Australia. Por su parte, Fernando Verdasco tuvo suerte con su cruce, por abandono de su rival, pero le ha tocado un 'coco' en octavos, el ruso Nikolay Davydenko [Todos los resultados].

Serena, defensora del título, se impuso por 6-0 y 6-3 a la jugadora canaria, mientras que Federer derrotó a Montañés por 6-3, 6-4 y 6-4, para situarse ambos en los octavos de final contra la australiana Samantha Stosur, y contra el ganador del encuentro entre el chipriota Marcos Bahgdatis y el australiano Lleyton Hewitt, respectivamente.

El triunfo de Serena se materializó en 81 minutos, tiempo en el que la menor de las Williams se tomó cumplida venganza de la derrota del año pasado de su hermana mayor Venus a manos de la española.

Serena salió lanzada por la victoria y tomó una ventaja de 5-0, de tal forma que parecía que el partido sería demasiado rápido. No como deseaba la canaria, cuya mejor apuesta era alargar los puntos y envolver a Serena en una tela de araña.

Cae la última española

Carla, cuarta finalista el pasado año, no consiguió este efecto hasta el interminable juego del primer set en el se jugaron 13 "deuces" y que la española no cedió hasta la octava oportunidad. "Algunos momentos me hicieron gracia y todo. Ha sido el partido que más me he reído y más he disfrutado por quien tenia enfrente", dijo Carla al recordar ese momento del partido [Así va el cuadro femenino].

Serena parecía impotente para cerrar esa manga, y asistía estupefacta a una encomiable defensa de la española, que si bien perdió finalmente el juego con una "caña", encontró allí más ritmo para afrontar luego el segundo parcial, mucho más suelta.

En el segundo set Carla cedió su saque en dos ocasiones pero actuó más suelta, desplegando mejor sus golpes, y moviendo mucho mejor a su rival. Pese a todo no pudo impedir que la mayor fuerza de su rival le arrollara. El problema es que dispuso de seis puntos de rotura y no logró confirmar ninguno, y mientras, cedió su saque cinco veces.

"Pensé en cómo hacerle daño pero sin olvidarme quien era ella, y al final no he podido perder con nadie mejor, y actualmente lo es", dijo la canaria, quien admitió que le había costado meterse en e partido, pero que al final no dejó de disfrutar.

"La próxima vez que juegue contra ella, ya la conozco al cien por cien", avisó, "porque es una de esas jugadoras que engañan", añadió Carla que desea para este año "un mejor ránking, y cuanto más alto mejor".

Con la derrota de Suárez, el tenis español pierde a la última de sus cuatro jugadoras, que no obstante no regresan a casa, porque disputarán, del 6 al 7 de febrero la eliminatoria del Grupo Mundial 2 de la Copa Federación contra Australia en Adelaida. 

Federer, invencible

Montañés tampoco tuvo demasiado tiempo para reaccionar ante Federer, con el que había perdido en dos ocasiones anteriores, en Montecarlo 2005 y Roland Garros 2008 en tierra.

En su visita a la Rod Laver Arena, al español le faltó algo más de tiempo para asegurar sus golpes y dar más batalla al número uno del mundo, en una edición especial para él, pues hasta este año no había logrado ganar un solo partido en las ocho precedentes visitas a Melbourne.

El problema de Montañés fue que se vio presionado desde el principio por el acelerador que Federer impone en todos sus encuentros. Cedió su saque una vez en cada set, y no pudo ni siquiera arañar el de su rival, ni ponerle siquiera en peligro una sola vez. Federer acabó con 36 golpes ganadores, por solo 18 del español.

Verdasco-Davydenko, en octavos

El madrileño Fernando Verdasco se colocó en los octavos de final del Abierto de Australia, al vencer al austríaco Stefan Koubek, por 6-1 y abandono. El jugador centroeuropeo estuvo en pista nada más que 23 minutos y acabado el primer set decidió abandonar el encuentro porque se encontraba mal físicamente.

Verdasco, semifinalista el pasado año, se enfrentará en octavos con el ruso Nikolay Davydenko, sexto favorito, que se impuso al argentino Juan Monaco por 6-0, 6-3 y 6-4 en 109 minutos.

Gran victoria de Almagro que le coloca en octavos

El español Nicolás Almagro venció al colombiano Alejandro Falla, por 6-4 y 6-3, 6-4 y se colocó por primera vez en los octavos de final del Abierto de Australia.

Después de ganar sus primeros dos partidos ante el belga Xavier Malisse y el alemán Benjamin Becker, en cinco sets cada uno, Almagro lo hizo fácil ante Falla, y con un gran juego se encuentra ahora a punto de igualar su mejor marca en el Grand Slam, en una torneo en el que sufre una rotura de escafoides en su mano izquierda.

Hasta ahora el mejor resultado de Almagro en un grande se ha dado en Roland Garros, donde en 2008 alcanzó los cuartos de final, y donde cayó ante Rafael Nadal. Para igualar esa ronda en Melbourne, el tenista murciano deberá ganar ahora al vencedor del duelo entre el francés Jo-Wilfried Tsonga y el alemán Tommy Haas.

Almagro ya había ganado a Falla en un torneo de la categoría Futures disputado en Alicante en 2003. Allí se impuso el murciano por 6-3 y 6-4. Esta vez, en la pista dos del complejo de Melbourne Park, el español se adaptó mucho mejor al viento que su rival para sacar el encuentro adelante, con un gran despliegue de efectividad y potencia en dos horas y tres minutos, y a la tercera bola de partido.

Falla, que se mostró impecable en el encuentro anterior ante el español Marcel Granollers, tenía una motivación especial. Luchaba por convertirse en el segundo colombiano en lograr los octavos en un Grand Slam, después de Jairo Velasco en el Abierto de EE.UU. en 1976, pero el buen juego de Almagro lo impidió.