El Madrid examina su fuerza local sin Cristiano

15 años ganando en el Bernabeu

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Real Madrid: Iker Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Raúl Albiol, Marcelo; Xabi Alonso, Guti, Granero; Kaká, Raúl o Higuaín y Benzema.

Espanyol: Kameni; Roncaglia, Pareja, Víctor Ruiz, David García; Baena, Javi Márquez; Luis García, Verdú, Corominas; y Osvaldo. EFE

Árbitro: Pérez Burrull (colegio cántabro).

Estadio: Santiago Bernabéu.

Hora: 22.00h.

El Real Madrid afrontará su segundo encuentro sin su referente, el portugués Cristiano Ronaldo, ante un Espanyol que llega con el papel de víctima al estadio Santiago Bernabéu, donde el conjunto madridista examina su fuerza como local tras firmar un pleno de victorias en Liga.

La fiabilidad del Real Madrid en el Bernabéu la demuestran sus diez triunfos en diez choques ligueros, con un balance de 32 goles a favor y seis en contra. El Espanyol será el próximo rival que intentará fulminar el fortín blanco.

Aunque llega el Real Madrid en un momento cumbre de su temporada. Crecido en su autoestima tras romper la 'maldición de Riazor' 18 años después, superando una plaga de bajas y la tan hablada ausencia de Cristiano Ronaldo por su expulsión ante el Málaga.

Curiosamente el conjunto blanco firma sin el portugués sus dos mejores partidos a domicilio en Liga -Mestalla y Riazor- y el último triunfo liguero, pese a no servir para recortar los cinco puntos de distancia con el Barcelona, son un impulso anímico para el resto de la plantilla, entre ellos José María Gutiérrez 'Guti' que protagoniza una nueva 'resurrección'.

El juego del Real Madrid en Coruña con un centro del campo repleto de jugadores de calidad, con gusto por el balón -Xabi Alonso, Guti, Granero y Kaká-, generan dudas en Pellegrini una vez recuperado 'Lass' Diarra de su lesión. Aunque en su mente el doble pivote es inamovible, todo indica a que repetirá ante el Espanyol si Guti supera unas leves molestias lumbares.

Por primera vez en la temporada Pellegrini no ofrecerá la lista de convocados hasta el día del partido. Son seguras las bajas de Cristiano, por sanción, y Pepe, por lesión. Tienen muy complicado estar los 'tocados' Garay y Metzelder. Y con la segura recuperación de Arbeloa, que sufrió un golpe en la rodilla en Riazor, el técnico debe decidir que jugadores cita de los recién recuperados entre Higuaín, Van der Vaart, Mahamadou Diarra y Gago.

Mientras, el Espanyol llega al Bernabéu con el cartel de víctima después de sus malos resultados como visitante -siete jornadas consecutivas sin ganar a domicilio-, y agarrándose como principal argumento a la buena imagen que ha ofrecido dada ante los equipos más potentes del campeonato.

Logró empatar ante el Sevilla con un jugador menos y perdió ante el Barcelona y el Valencia por la mínima. En las últimas temporadas la imagen ante los grandes siempre ha sido muy positiva y es un dato a tener en cuenta. Sin embargo, los números indican otra realidad. Fuera de casa, sólo ha sumado cinco puntos y ha logrado tres goles a favor. En ocho de los nueve encuentros ha sido incapaz de marcar. Sólo los recién ascendidos presentan peores números fuera de casa hasta el momento. Las estadísticas son muy negativas.

El Espanyol se encuentra en pleno proceso de reconstrucción. Los referentes de antaño como Raúl Tamudo o Iván de la Peña han perdido protagonismo por diversos motivos y el equipo sigue buscando a un líder. Las circunstancias han llevado a reforzar la apuesta por la cantera y por futbolistas jóvenes.

Mauricio Pochettino presentará ante el Madrid un equipo con tres jugadores que hace medio año jugaban en Tercera División: Víctor Ruiz, Raúl Baena y Javi Márquez. Salvo sorpresa, Carlos Kameni defenderá nuevamente la portería españolista y Roncaglia entrará en el lateral derecho por el sancionado Chica.

Otra de las dudas es saber quién será el sustituto de José Callejón, quien no puede jugar porque así lo refleja el contrato. Ferran Corominas es quien tiene más opciones aunque no se puede descartar la presencia de Fernando Marqués. Osvaldo, Luis García y Joan Verdú parecen intocables.

La victoria de la última jornada otorga menos trascendencia a este encuentro y, por tanto, la presión es menor. Todo lo que sea puntuar será considerado como un éxito por parte de los españolistas, que siguen buscando un buen resultado ante uno de los grandes del campeonato.