El Unicaja consigue una victoria importante en su camino europeo
- Los de Aíto consiguen su primera victoria en la 2ª fase ante el Zalgiris (86-68)
- Los lituanos de Kaunas acusaron sus problemas económicos y deportivos
Ficha técnica:
86 - Unicaja
(21+19+24+22): Cook (13), Jiménez (10), Welsch (5), Dixon (16), Archibald (15)-cinco inicial-, Dowdell (4), Rodríguez (0), Rubio (0), Printezis (14), Freire (0) y Lima (9).
68- Zalgiris (6+23+18+21): Kalnietis (6), Brown (11), Salenga (7), Klimavicius (6), Watson (6)- cinco inicial- Capin (5), Pocius (11), Juskevicius (1), Delas (2), Begic (10) y Milaknis (3).
El Unicaja consiguió la primera victoria de la segunda fase ante el Zalgiris, que a pesar de sus problemas económicos y deportivos cuajó un buen encuentro, y continúa con opciones de clasificarse para los cuartos de final.
Los aficionados que acudieron al Martín Carpena aún recordaban el ridículo y la falta de actitud ofrecida por el Unicaja ante el Asseco Prokom polaco hace una semana. Pero hoy fue todo diferente. El equipo cajista salió muy mentalizado, agresivo frente a un Zalgiris que no dio el nivel en el primer cuarto.
Los primeros diez minutos 21-6 resumieron lo que parecía que iba a ser todo el encuentro. Intensidad defensiva del Unicaja y un Zalgiris que muchos se preguntaban como estaba jugando la segunda fase. Escaso de calidad y con muchos problemas tanto dentro como fuera de las zonas no podía con el juego interior de los cajistas.
Pero el Unicaja, en el segundo cuarto, se dedicó a bostezar y el Zalgiris solamente aprovechándose de la endeblez defensiva firmó un parcial de 0-13 situando el marcador 29-25 (minuto 17) y poniendo en entredicho al juego de los locales, aunque el físico no les aguantó y terminaron sucumbiendo por 40-29.
El Zalgiris no se amilanó y puso en aprietos en algún momento al Unicaja, aunque éste cuando forzaba en defensa era muy superior 53-38 (m.24). El partido parecía decantado y más tras dos triples consecutivos de Welsch y Dowdell que situaron la máxima ventaja: 64-47.
Entre Dixon desde fuera, y Printezis y Archibal, dentro de la zona, se bastaron para doblegar definitivamente al Zalgiris que cayó porque las fuerzas no le dieron para da más y por la diferencia de calidad de la plantilla.