Regal Barcelona, aún más líder
- Los catalanes se han impuesto al Estudiantes por 79-70
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Ficha técnica:Ficha técnica:
Regal Barcelona: Rubio (3), Basile (16), Mickeal (13), Morris (4), N'dong (6) --cinco inicial--; Trias (-), Lakovic (10), Navarro (-), Vázquez (7), Sada (-), Lorbek (12) y Grimau (8).
Asefa Estudiantes: Oliver (2), Lofton (20), Suárez (13), Caner-Medley (4), Popovic (6) --cinco inicial--; Driesen (-), Clark (9), Granger (4), Gabriel (10) y Beirán (2).
Parciales: 24-13, 18-23, 17-15 y 20-19.
Árbitros: Perea, Conde y Soto. Sin eliminados.
Pabellón: Palau Blaugrana, 6.043 espectadores.
El Regal FC Barcelona ha conseguido una nueva victoria en el Palau Blaugrana (79-70), esta vez contra el Asefa Estudiantes, que sirve como revancha por la derrota del año pasado y como aviso de cara a una posible semifinal de Copa, si bien los estudiantiles hicieron un buen partido y apretaron las tuercas a los blaugrana.
Estudiantes, justo antes del parón liguero, puso en aprietos al líder de la ACB en la primera parte, cuando fue capaz de recuperarse de un flojo inicio para acabar luchando de tú a tú contra los hombres de Xavi Pascual, y al final del partido. En el Barcelona, sólo algunas rachas, efectivas pero cortas, de Lakovic y Basile desde el triple permitieron anotar desde lejos, aunque Lorbek lideró el juego interior con maestría y el paso de los minutos pudo con los madrileños.
No obstante, el Estudiantes demostró por qué es el equipo con más rebotes de la liga y hoy también fue superior en este apartado. Sólo al descanso ya capturaron 17, e hicieron daño en el rebote ofensivo, hecho que sin duda les ayudó a no quedarse atrás en el marcador y a llegar al final con ciertas opciones.
Los blaugrana, con un buen primer cuarto en el que, sin arrollar, fueron haciéndose con el dominio en el marcador, se relajaron en defensa y notaron una falta de creatividad cuando Ricky se fue al banco. Así, el segundo cuarto fue para los estudiantiles, liderados por un Suárez muy acertado e incisivo.
El recuerdo del año pasado estuvo presente en el Estudiantes, quien nunca perdió la esperanza de volver a asaltar el Blaugrana. Sin embargo, este año ningún equipo ha podido hacerlo y es que el Bara, tarde o temprano, encuentra la forma y el momento para 'matar' los partidos. Con esta intención saltaron a la pista los locales en el tercer periodo, aunque 'Estu' se defendió con garras.
Ricky Rubio, desquiciando a los defensas con sus internadas, dio varias asistencias a sus compañeros y encontró en Pete Mickeal a su artillero, pues el norteamericano desplegó sus recursos -fintas, amagos y reversos- para encontrar tiros fáciles. Pese a llevarse el tercer periodo, éste fue muy igualado y Estudiantes empezó el cuarto definitivo a 8 puntos de distancia.
Desde la banda, Pascual intentaba que sus hombres hicieran una presión a toda la pista, y lo cierto es que funcionó en distintas ocasiones. Se vio un juego intenso en defensa, en ambos lados, lo que propició un marcador corto y un tipo de juego en el que los blaugrana no están cómodos.
Por ello, el Regal Barcelona intentó darle velocidad al balón y salir al contraataque para que Estudiantes no pudiera replegarse. Ayudó a ello la efectividad de un Gianluca Basile que cuajó un buen partido, sobre todo desde la línea de 6,25 metros. Gracias a ello, la barrera de los 10 puntos volvió a erigirse como una frontera difícil de alcanzar para los estudiantiles.
Con la rapidez encontrada, el Barcelona consiguió escaparse. Estudiantes intentaba no perder el tren, pero un Basile enrachado, en su eterna juventud, dilapidó sus opciones. Como en la victoria sobre Panathinaikos del pasado jueves, Grimau imprimió su garra. Cierto es que no tiene buenos números desde fuera, pero sus penetraciones consiguen cargar de personales al rival y contagiar a compañeros y público.
En un día en el que Navarro no estuvo, sí físicamente, sobre la pista, fue importante que otros le cogieran el relevo. Hoy el escolta internacional rompió una larga racha de partidos anotando por lo menos 10 puntos, y es que hoy no inauguró su cuenta particular.
Mientras, en el cuadro estudiantil Lofton se dedicó a tirar todos los balones que pasaron por sus manos y metió algunos triples que hicieron lo propio con su equipo en el marcador. A falta de 2 minutos, la diferencia bajó a los 9 e incluso llegó a ser de 7 puntos, cuando la diferencia máxima para los blaugrana en el último cuarto fue de 18 puntos.