Portugal no convence aunque Cristiano se luce
- Portugal gana a China por 2-0 pero evidencia su falta de argumentos
- Inglaterra calma su sed de polémica con una victoria sufrida ante Egipto
- Italia y Camerún aburren con un decepcionante empate a cero
La selección de Portugal ganó en su compromiso amistoso ante China (2-0) gracias a los goles de Hugo Almeida y Joao Moutinho, donde los lusos mostraron una versión poco convicente.
A tres meses del estreno en el Mundial, el cuadro de Carlos Queiroz venció a China sin un juego vistoso y con muchas cuestiones aún por resolver, en el regreso de Cristiano Ronaldo al combinado portugués tras su última y polémica aparición, la que propició la recaída de su lesión de tobillo allá por el mes de septiembre.
El jugador más caro del mundo firmó una de sus mejores actuaciones con la selección en el último año al desbordar varias veces por la banda izquierda y creando centros peligrosos que sus compañeros desaprovecharon. El 9 del Real Madrid demostró su buen momento de forma cuando robó un balón en el centro de campo y antes de superar al último defensa de la selección china dio una generosa asistencia a su compañero Hugo Almeida, ariete del Werder Bremen, que consiguió el primer gol de la noche (m.36).
Además de la notable actuación de Ronaldo, la selección dirigida por Carlos Queiroz no tuvo ningún otro motivo de alegría, se mostró muy imprecisa, y notó la ausencia de su cerebro, el centrocampista del Chelsea Deco, que era baja por lesión.
Portugal se nutrió del desplazamiento en largo y del fútbol efectivo para batir a un cuadro asiático que tampoco ofreció resistencia. El primer tanto del partido llevó la firma de Hugo Almeida, a diez minutos del descanso, y Moutinho cerró la cuenta en el tiempo de descuento.
En un partido donde lo más destacado fue la titularidad del atlético Tiago, que ha mostrado que sus galones no son casualidad en el conjunto rojiblanco, la Portugal de Queiroz -que necesitó de la repesca para confirmar su presencia en Sudáfrica- necesita retoques y reza por la recuperación milagrosa de Pepe para el certamen del próximo mes de junio.
Inglaterra calma los nervios venciendo a Egipto en Wembley
Inglaterra derrotó a Egipto por 3-1 en un partido amistoso disputado en Londres que sirvió para tranquilizar los nervios de una selección que ha vivido en las últimas semanas a la sombra de los escándalos sexuales de algunos de sus hombres más importantes.
A pesar de los peticiones públicas del seleccionador, el italiano Fabio Capello, y de Wayne Rooney, parte de los 75.000 espectadores que acudieron a Wembley recibieron con abucheos a John Terry, convertido en villano por su relación con la ex novia de su antiguo compañero en el Chelsea Wayne Bridge, ahora en el Manchester City. El brazalete de capitán lo llevó Gerrard.
No obstante, un partido que empezó con pitos acabó con aplausos, sobre todo para el delantero Peter Crouch, quien entró en la segunda mitad por Jermaine Defoe para marcar dos tantos y evitar la tragedia que se mascaba al término de los primeros 45 minutos. Y es que Egipto, campeona de África, se fue al descanso con ventaja en el marcador y dejando entre los "Pross" una sensación de impotencia y frustración ante el buen hacer de los "Faraones".
Para la segunda mitad, Capello introdujo a Crouch por Defoe -decepcionante esta temporada tanto en la selección como en el Tottenham- y dio descanso a Lampard por Carrick, un pivote defensivo más adecuado para jugar junto a Barry.
La victoria de Inglaterra debería servir como el bálsamo que quiere Capello tres meses antes de que la expedición de los "tres leones" viaje a Sudáfrica y para afianzar a Crouch como el mejor relevo (o pareja) de Rooney, muy activo hoy, aunque sin suerte de cara a la portería.
Italia y Camerún aburren con su empate a cero
Las selecciones nacionales de Italia y Camerún empataron (0-0) en un encuentro donde ambos equipos tendrán que mejorar su imagen si quieren aspirar a algo en la cita africana.
A pesar de los numerosos jugadores de gran nivel que presentaron las dos selecciones, como Cannavaro, Eto'o o Di Natale, ninguna fue capaz de desarrollar un juego fluido y crear ocasiones claras de anotar al menos un gol que animara a los aficionados que se desplazaron hasta Mónaco para ver el partido.
Ni siquiera la dirección desde los banquillos de dos grandes entrenadores como Marcello Lippi, por Italia, y el francés Paul Le Guen, por Camerún, fueron suficientes para empujar a sus jugadores y explicarles el camino a seguir para dar muestras de que pueden llegar a hacer algo en el Mundial, algo complicado si compiten así.
La única nota positiva del partido fue el estreno con la selección italiana del defensa del Bari Leonardo Bonucci, de 23 años, que se enfundó la camiseta 'azzurra' por primera vez, aunque como recuerdo se llevará la tarjeta amarilla que le mostró el colegiado francés Said Ennjimmi a falta de dos minutos para el final del encuentro.