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De la Rosa, ante el reto de redescubrirse como piloto

  • "Todavía es difícil decir a qué tipo de circuito se adaptará bien nuestro coche"
  • "Lo mejor del circuito de Bahrein es que puedes adelantar"
  • "Con la prohibición de repostar, el equipo podrá influir mucho más"

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Pedro Martínez de la Rosa, a bordo de su monoplaza en los entrenamientos de pretemporada en el circuito de Montmeló.
Pedro Martínez de la Rosa, a bordo de su monoplaza en los entrenamientos de pretemporada en el circuito de Montmeló.

El español Pedro Martínez de la Rosa, nuevo piloto oficial de BMW Sauber, vuelve a la competición el próximo fin de semana con la disputa de la primera carrera de la temporada, el Gran Premio de Bahrein de Fórmula Uno, de cuya pista destaca que "lo mejor es que puedes adelantar".

"Guardo muy buenos recuerdos de la pista de Bahrein, pues cuando en el 2005 tuve que competir firmé la vuelta rápida y acabé quinto y en el 2007 estuve rodando dos días durante los entrenamientos privados de pretemporada", explicó de la Rosa en el comunicado de su equipo.

"Creo que la nueva sección añadida en el 'infield' la convertirá en una pista nueva, porque significa que tendremos que aumentar el nivel de carga aerodinámica, además de que hay tres largas rectas seguidas de una curva donde hay que frenar fuerte", explicó el piloto español, confirmado como oficial de BMW Sauber F1 Team el pasado 19 de enero.

"Todavía es difícil decir a qué tipo de circuito se adaptará bien nuestro coche pero estoy convencido que será muy interesante ver cómo se irán descubriendo las estrategias y cómo irán reaccionando los equipos durante la carrera", comentó Pedro Martínez de la Rosa, quien ha completado más de 2.500 kilómetros en ocho días de pruebas en los que se ha adaptado en un tiempo récord a su nuevo equipo y al monoplaza.

"Debido a la prohibición de repostar, el equipo podrá influir mucho más que en anteriores temporadas", afirmó el piloto, quien reconoció que el objetivo de la escudería para esta temporada es igualar el sexto puesto en el Mundial de Constructores de 2009.

El circuito Sakhir está situado en medio del desierto y, al igual que el de Shanghai, fue diseñado por el alemán Hermann Tilke, por lo que es un circuito de última generación, muy moderno y seguro con una pista muy ancha que facilita los adelantamientos y con fuertes frenadas en las que el desgaste de los neumáticos jugará una baza determinante.