Alonso se sube a un 'cavallino' ganador
- El bicampeón español vuelve a contar con garantías para ganar el Mundial
- El F10 destaca por un morro elevado y muy afilado en forma de bala
- Este fin de semana se inicia en Bahrein el campeonato del mundo de F1
El bicampeón español Fernando Alonso vuelve a contar este año con un equipo con garantías para hacerse con el campeonato del mundo de Fórmula Uno que se inicia este fin de semana en Bahrein donde el piloto asturiano ha avanzado que se conformaría con hacer podio.
El F-10 de la marca de 'il cavallino rampante' parece, a priori, una máquina perfecta para que Ferrari vuelva a asumir el liderazgo del 'gran circo' perdido tras la marcha del heptacampeón Michael Schumacher y sólo recuperado en 2007 con el triunfo del finlandés Kimi Raikkonen.
El monoplaza del asturiano, inspirado en el diseño del RB5 de Red Bull, destaca por un morro elevado y muy afilado en forma de bala y una mayor longitud de chasis para albergar un gran depósito de combustible que permita cargar al menos 220 litros, debido a que este año están prohibidos los repostajes.
El handicap para Ferrari es que el F10 es uno de los coches más 'tragones' del circuito, motivo por el que los ingenieros de Maranello han trabajado sin descanso en un nuevo sistema de inyección que disminuya el consumo de carburante y en el diseño del depósito dirigido a mantener el reparto de pesos ideal durante toda la carrera.
De momento, los test de pretemporada han dado muestras de que Alonso cuenta con un coche a su medida con el que espera conquistar su tercer campeonato del mundo tras los conseguidos en 2005 y 2006 con Renault, pero es ahora cuando llega el momento de la verdad y de demostrarlo en la pista.
Los favoritos para hacerse con el título son el vigente campeón Jenson Button y el también británico Lewis Hamilton, ambos en McLaren, los Red Bull de Vettel y Webber y el Mercedes GP de Michael Schumacher.
Sea quien sea el ganador, lo que parece claro es que el nuevo sistema de puntuación, que dará 25 puntos al primero, 18 al segundo y 15 al tercero, parece ser un aliciente más para que volvamos a vivir duelos apasionantes en la Fórmula Uno que nos hagan olvidar los tediosos grandes premios de temporadas pasadas.