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Godall también abandona la carrera electoral del Barça y deja el camino libre al continuista Ferrer

  • El vicepresidente da este paso horas después de la retirada de Soriano
  • Godall se siente defraudado después de que Laporta le retirara su apoyo
  • El candidato continuista Ferrer y Sandro Rosell protagonizan ahora el proceso

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El vicepresidente primero del Barcelona, Alfons Godall, acaba de liquidar su precandidatura a la presidencia del club azulgrana e, incluso, ha expresado la posibilidad de dimitir como directivo.

Godall ha comunicado al personal de la campaña '+Barça' que cesa su objetivo de alcanzar la presidencia del club en las elecciones del 13 de junio de este año y en breve liquidará también el local que inauguró hace justo dos meses.

El aún vicepresidente primero del Barcelona, que anoche no asistió al partido Barça-Osasuna, y que ha adelantado que no comparecerá a la reunión de la junta directiva de este viernes, se ha mostrado dolido porque ha asegurado haber tenido en sus manos la posibilidad de contar con una candidatura continuista para asaltar la presidencia del Barcelona.

La renuncia definitiva de Godall llega pocas horas después de que el presidente de Spanair, Ferran Soriano, haya anunciado que también abandona sus planes para situarse en el proceso electoral del Barcelona. Se da la circunstancia de que tanto Soriano como Godall habían tratado la opción de ir juntos en una precandidatura.

A pesar del momento por el que atraviesa Godall, y de haber dejado entrever que incluso meditará abandonar el club, también ha señalado que estaría dispuesto a jugar la última carta electoral si finalmente "se crea un grupo que pueda ocupar un espacio central en el barcelonismo", un discurso muy parecido al que ha pronunciado esta tarde Soriano.

Godall da por rotas las relaciones con el presidente Joan Laporta, amigo íntimo de la infancia, después de que éste le retirase el apoyo hace unos días para brindárselo a otro vicepresidente, Jaume Ferrer, quien ahora cuenta con el apoyo de la directiva y del mandatario para ser la precandidatura continuista.

Se abre el camino a un duelo Ferrer-Rosell

"Me costará volverme a sentar en la tribuna del Camp Nou. La jugada que tenía en las manos era ganadora en las elecciones a la presidencia. Por suerte, el espacio central aún está intacto", se ha lamentado Godall, quien otorga a Ferrer y a Sandro Rosell los dos polos opuestos, del laportismo y del antilaportismo, respectivamente.

Godall ha argumentado que no quiere asistir a la reunión de este viernes de la junta porque no quiere que lo utilicen, cuando los miembros puedan llegar a debatir un grupo cohesionado para ir a las elecciones.

Respecto a la decisión de haber liquidado esta tarde la precandidatura, Godall ha argumentado que ésta no tenía sentido porque se sentía "solo". "No podía tirar del carro solo. '+Barça' era una idea de proyecto de continuidad del modelo pero con otra gente", ha concluido.