El Madrid restaña heridas apalizando al 'Estu'

• Los de Messina derrotan por 101-77 al Estudiantes
• Los blancos dieron un recital desde la línea de tres con 17 triples
• Tras su caída en Europa, se enfrentan de nuevo al Barça el próximo sábado

El Madrid cura heridas con el Estu

Ficha técnica:

101 - Real Madrid (23+23+29+26): Tomic (2), Hansen (9), Garbajosa (13), Prigioni (6), Llull (16) -equipo inicial-, Jaric (14), Lavrinovic (8), Reyes (4), Velickovic (6), Vidal (2), Kaukenas (5) y Bullock (16).

77 - Asefa Estudiantes

(15+20+21+21): Oliver (2), Suárez (13), Popovic (4), Clark (5) y Lofton (19) -equipo inicial-, Jasen (13), Granger (8) y Driesen (13).

Árbitros: Juan L. Redondo, Juan C. García y Pedro Munar. Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésima octava jornada de Liga ACB disputado en el Palacio Vistalegre ante 8.200 espectadores.

No hay como una victoria abultada para olvidar una dolorosa derrota. Los de Messina se aplicaron esta máxima y vapulearon al Estudiantes por 101-77 en Vistalegre [Estadísticas], calmando así la rabia por su eliminación en la Euroliga ante el Barcelona, contra el que se vuelve a enfrentar en la ACB la próxima semana. El conjunto blanco aniquiló al estudiantil desde la línea de triples con 17 triples (60% acierto).

Fue un partido sin historia en el que los de Messina no dieron opción a su rival con un tercer cuarto imparable. Bullock (4 triples), Llull(4), Garbajosa (3) y Jaric (4) aniquilaron desde el perímetro a su contrincante y desquiciaron a los colegiales, con una defensa muy cándida durante todo el encuentro.

El encuentro empezó igualado con un bonito duelo entre Suárez y Hansen. El alero estudiantil, jugador español más valorado en la ACB, se midió con el de Utah. El nacionalizado ruso abanderó el primer tirón en el marcador de los locales. Gracias a un triple suyo y otro de Garbajosa los blancos se ponían 18-10, lo que obligaba a Casimiro a pedir tiempo muerto.

Los colegiales empezaron a errar, ora unos pasos de Oliver ora una pelota perdida de Popovic, y el Madrid no perdonó. Un triple de Llull certificaba un parcial de 13-2 para los de Messina, que cerraban el cuarto con un favorable 23-15. Sólo Clarck, con un triple antes de la bocina, inquietaba un ápice a los blancos, conscientes de que el británico les había aguado la fiesta en el partido de la primera vuelta, perdido en la prórroga.

El segundo periodo empezó como terminó el anterior, con un triple del conjunto estudiantil. Yannick Driesen empujó con un gran cuarto (7 puntos) a los suyos, aunque no consiguieron reducir distancias con el Madrid. El pívot belga, que terminó con 13 puntos el partido, demostró que sabe anotar de tres y correr al contrataque, algo sorprendente para un jugador de 2,16 m.

Un mate de Ranger y un 2+1 de Lofton obligaron a Messina a pedir tiempo con el 34-27 en el luminoso. No irían más lejos los colegiales, que vieron como Bullock desde el perímetro y Lavrinovic en la pintura fundían su defensa y terminaban la primera parte con un favorable 46-35 para los locales.

El Madrid aniquila al Estudiantes en el tercer cuarto

Un inicio del Madrid galvánico tras el descanso tiró por tierra cualquiera aspiración estudiantil. Fueron minutos de locura desde el perímetro. Lofton intentó mantener a los suyos, pero Llull y Garbajosa, por partida doble, aniquilaron a los colegiales desde la línea de tres.El Madrid funcionaba como una apisonadora y en apenas tres minutos anotó 15 puntos, fijando un marcador de 61-43.

Frustrado e impotente, el base Oliver cometía una antideportiva que, sumado a un nuevo triple de Llull establecían la máxima diferencia blanca (68-45) hasta ese momento. Jaric, de nuevo desde tres, y Felipe Reyes, cerraban el cuarto con un favorable 75-56

En el último periodo el Madrid se dedicó a perforar el aro estudiantil desde los 6,25, con un inspiradísimo Jaric (tres triples en este cuarto), llegando a situarse con una sonrojante diferencia cercana a los treinta puntos en el marcador (92-63).

Fue un cuarto en el que hubo más canastas de tres que de dos, todo un festival. En los últimos minutos el Madrid, empachado de triples, se dejó llevar y los de Casimiro maquillaron en la medida de lo posible el resultado (101-77).

La victoria sirve a los de Messina para coger aire antes de un nuevo enfrentamiento contra el Barcelona, su verdugo esta temporada, contra el que se enfrentan de nuevo el próximo sábado en la Liga ACB.