Semenya escoge Zaragoza para volver a las pistas
- La atleta sudafricana confía en que las pruebas de género le den la razón
- Semenya amenazó con llevar su caso ante la justicia ordinaria
La atleta sudafricana Caster Semenya, campeona del mundo de los 800 metros, ha anunciado que esperará el resultado de sus análisis de género y que regresará a las pistas en junio, durante la VII Reunión Internacional de Atletismo Gobierno de Aragón.
"Junto con mi entrenador y mi agente, he decidido que regresaré a la competición en la reunión de la AEA el 24 de junio en Zaragoza. Reitero que, basándome en consejos legales y médicos, mantengo firmemente que no existen impedimentos para que dispute competiciones femeninas de atletismo", dijo la atleta en un comunicado.
De todos modos, la Federación Española de Atletismo ha salido al paso y ha dejado claro que no permitirá a Semenya competir a menos que tena la autorización expresa de la Federación Internacional (IAAF).
Semenya amenazó la semana pasada a la ASA con acudir a la justicia ordinaria si se le negaba la posibilidad de competir en la última prueba de las "Yellow Pages", tal y como sucedió el pasado martes en Stellenbosch, sin embargo ha decidido rectificar.
"He considerado la solicitud de la ASA de que espere a junio, a la conclusión del proceso iniciado por la IAAF, para regresar a la competición", ha dicho Semenya, quien muestra agradecimiento a la ASA por haber manifestado que presionará para que el resultado de las pruebas se conozca definitivamente en junio.
"Confío en que la ASA hará las cosas con honor y mantendrá su palabra", dice el comunicado, en el cual Semenya anuncia que ha dado órdenes a sus abogados para que consigan de la IAAF una confirmación de que el resultado del análisis de sexo a los que se sometió el pasado verano estará listo en dos meses.
Semenya lleva más de siete meses pendiente de que un remoto laboratorio decida acerca de su sexualidad, después de que se la acusase de ser hermafrodita, para saber si puede seguir compitiendo y en qué condiciones.
Las sospechas surgieron después de que la atleta sudafricana consiguiese, con sólo 18 años, imponerse en la final del Mundial con un espectacular margen de 2.45 segundos sobre la defensora del título, la keniana Janeth Jepkosgei, que cruzó la meta en 1:57.90.