El Sevilla termina la temporada por todo lo alto
- Los hispalenses se clasifican 'in extremis' para la Champions y logran la Copa
- El equipo fue eliminado de Europa y tuvo altibajos en la Liga
- Los de Nervión se confirman como unos especialistas en finales
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El título logrado de la Copa del Rey por el Sevilla, tras vencer en la final ante el Atlético de Madrid por 0-2, permite al equipo de Nervión terminar con buen pie una temporada marcada por la irregularidad. Tras un buen inicio de competición, los hispalenses sufrieron la eliminación de la Liga de Campeones en octavos de final y numerosos tropiezos en Liga que terminaron con la destitución del entrenador Manolo Jiménez.
Sería injusto olvidarse de él puesto que parte de este título, el quinto torneo del KO que lucirá en las vitrinas sevillistas, es suyo. Antonio Álvarez, un hombre de la casa, segundo de Caparrós y Juande, lo sustituyó a falta de diez jornadas para terminar la Liga y se ha ganado con resultados su continuidad al frente del equipo.
Álvarez ha logrado ocho victorias en once partidos, ha devuelto al Sevilla a la gloria con el torneo copero y ha conseguido la clasificación del equipo 'in extremis' para la ronda previa de la Liga de Campeones. Todo ello ha permitido a los hispalenses terminar la temporada con nota.
Los sevillistas han demostrado ser infalibles en las finales. En las últimas siete que han disputado han conseguido ganar seis. Desde el doblete de 2007 (UEFA y Copa del Rey), el club no había logrado un nuevo título que ha llegado ahora con esta Copa, noveno trofeo en la historia del sevillismo.
Los artífices de este triunfo hay que buscarlos en nombres como los de Navas, Capel y Palop, que tuvo paradas decisivas en la final. El guardameta ha sustituido al 'Gran Capitán', Javi Navarro', y con 36 años cumplidos ha demostrado ser un seguro bajo los palos. Su actuación en el Sánchez Pizjuán ante el Barcelona, en los cuartos de final de la comeptición, fue decisiva y, posiblemente, su mejor encuentro.
Un triunfo dedicado a Puerta
Palop subió a recoger el título de las manos del Príncipe Felipe portando la camiseta de Antonio Puerta con el número 16. La muerte súbita del jugador, en agosto de 2007, creó un trauma en el sevillismo, que sigue sin olvidar a su lateral izquierdo. Todo el equipo se acordó de Puerta, al que incluyeron en la celebración.
Los andaluces amargaron al Atlético su doblete y a Forlán su 31º cumpleaños, consiguiendo el repóquer en el torneo del KO. El sombrero de Del Nido trajo suerte a los suyos que cierran una temporada de altibajos con un brillante broche, celebrando el título copero en la Puerta de Jerez.
Ahora toca pensar en los refuerzos, estudiar la continuidad de Antonio Álvarez y, tras el Mundial de Fútbol, ponerse a preparar la ronda previa de la 'Champions', eliminatoria imprescindible para que el Sevilla vuelva a la Liga de Campeones, entre los grandes, lugar que se merece.