Ron Artest se redime y pone a los Lakers a un paso de la final

• Los Lakers han ganado a los Phoenix Suns por 103-101
• Una canasta sobre la bocina de Ron Artest les ha dado la victoria
• Todos los datos del partido

El jugador Derek Fisher de los Lakers de Los Ángeles intenta bloquear el lanzamiento de Steve Nash de los Suns de Phoenix.

Ficha técnica:

103 - Los Ángeles Lakers (24+29+25+25): Fisher (22), Bryant (30), Artest (4), Gasol (21), Bynum (2) -cinco inicial-, Odom (17), Brown (2), Walton (-), Vujacic (5) y Farmar (-).

 101 - Phoenix Suns (21+24+27+29): Nash (29), Richardson (12), Hill (10), Stoudemire (19), López (-) -cinco inicial-, Dragic (3), Frye (14), Dudley (10), Barbosa (2), Collins (-) y Amundson (2).

Árbitros: Salvatore, Davis y Delaney. Sin eliminados.

Incidencias: Quinto partido de la Final de la Conferencia Oeste, disputado en el Staples Center, de Los Ángeles, ante 18.997 espectadores. Lleno.

En un final digno de la mejor intriga hollywoodiense, Los Angeles Lakers pusieron el 3-1 en la serie frente a los Phoenix Suns (103-101) y se colocaron a un paso de alcanzar la Final de la NBA, con una canasta sobre la bocina de Ron Artest que le redimió tras firmar un encuentro nefasto.

Los angelinos se mantienen invictos en casa durante estos "play-offs", gracias a una jugada final que provocó el delirio en el Staples Center y tras la cual la plantilla angelina fue a arropar al jugador, abucheado instantes antes por sus decisiones sobre la pista.

Kobe Bryant volvió a dominar con 30 puntos, 11 rebotes y nueve asistencias, secundado por Pau Gasol, con 21 tantos, nueve rebotes y cinco asistencias. Lamar Odom, de nuevo imprescindible, firmó 17 puntos y 13 rebotes.

Por los Suns destacó Steve Nash, con 29 puntos y 11 asistencias, mientras que Amare Stoudemire se quedó en 19 tantos y cuatro rebotes.

Superioridad de los Lakers

Como en los dos primeros partidos de la serie, los Lakers superaron a su rival en la zona, tanto en rebotes como en puntos en la zona. Derek Fisher sumó su mejor marca anotadora de la temporada, con 22 puntos.

Pero las cosas no empezaron como esperaban los locales. En un arranque desconcertante, que incluyó dos tapones sobre Gasol a cargo de Stoudemire y Robin López, el equipo de Phil Jackson perdió en menos de tres minutos a Bryant, al cometer dos faltas personales.

Los Suns aprovecharon el momento (8-15) y pusieron las cartas boca arriba en territorio ajeno, con un ataque de libro y un clinic sobre distribución de balón a cargo de Nash.

Poco a poco y con un gran esfuerzo defensivo, los angelinos le dieron la vuelta a la situación al término del primer cuarto (24-21), con 11 tantos de Fisher y un Gasol entonado. No bajaron el ritmo los californianos después, ya con Sasha Vujacic, Jordan Farmar y Odom en pista.

Marcador muy igualado

Pero la tormenta aún estaba por llegar al desierto de Phoenix, y en un santiamén, Bryant enlazó tres triples consecutivos para disparar la renta hasta los dieciséis (41-25), mientras su equipo se empleaba a fondo en defensa, en especial Andrew Bynum, que neutralizó por completo a López.

No obstante, entre Nash y Stoudemire se las apañaron para adecentar la imagen de los Suns y llegar al descanso con 53-45 en el marcador, aunque las cosas podían ser muy distintas para los de Arizona de haber logrado un mejor porcentaje desde el triple (2/11).

Tras muchos minutos de travesía en tierra de nadie, de imposición de las defensas sobre los ataques y de intercambio de canastas, los Lakers aprovecharon un parcial de 14-5 para escaparse de nuevo (73-56).

Sin embargo, los de Alvin Gentry no se venían abajo, y con una jugada de cuatro puntos de Jared Dudley primero, y las aportaciones de Leandro Barbosa y Channing Frye después, recortaron la distancia a seis (78-72) a falta de un cuarto.

Un final de infarto

A Phoenix no le quedaba otra que poner toda la carne en el asador y apostó por una zona 2-3, pero Bryant la rompió de primeras con un triple. Los Suns persistieron. Nunca bajaron los brazos. Y eso les llevó a colocarse a un solo punto (95-94) tras canasta de Stoudemire.

Apareció Fisher para frenar la hemorragia con un triple y Jackson pidió un tiempo muerto a falta de 2:28. Pero de poco sirvió, ya que Nash anotó en dos ocasiones seguidas, en las que Gasol se quedó defendiéndole tras sendos bloqueos, y a continuación tanto Artest como el español fallaron sus tiros.

Todo ello propició que Richardson anotara un triple a la desesperada y empatara el partido (101-101) a falta de 3,5 segundos, para que poco después se diera el milagro Artest, que recogió el rebote tras un tiro fallado por Bryant.