Roger Federer: "Ahora solo quiero cambiar y concentrarme para la hierba"
- El número uno del mundo, desilusionado por su derrota en cuartos
- Elogia el juego de Soderling: "Ha sido muy regular en sus golpes"
- El sueco se ha felicitado por su victoria y ya piensa en una nueva final
El suizo Roger Federer ha señalado que tras ser derrotado en cuartos de final de Roland Garros por el sueco Robin Soderling solo quiere "cambiar" y "concentrarse para la hierba".
De esta forma, Federer quiso olvidar su derrota en París, que le impide ampliar su récord de 23 semifinales seguidas en el Grand Slam. "Ha sido una racha increíble, seis años, y estoy muy orgulloso de todo eso", comentó.
De su verdugo, Federer solo tuvo elogios. "Jugó increíblemente bien desde el principio hasta el final, teniendo en cuenta las malas condiciones. Yo no jugué un mal partido, pero él jugó un gran tenis", admitió el todavía número uno del mundo, que mencionó que la potencia de Soderling le recordaba la de un jugador que ha faltado este año, el argentino Juan Martín del Potro, su verdugo en la final del Abierto de EE.UU.
Federer no obstante, señaló que se encontraba desilusionado por las derrotas que ha tenido este año en tierra "en Estoril (contra el español Albert Montañés), Roma (el letón Ernest Gulbis) y esta", pero se olvidó mencionar la que encajó ante el español Rafael Nadal en la final del Masters 1.000 de Madrid, en un día soleado.
"Hoy tuve mis oportunidades en el segundo set, y en general perdí muchas en todo el partido. Creía que mi tenis era lo suficientemente bueno para volver aquí y ganar de nuevo, pero no ha sido el caso. El en cambio, ha sido muy regular en todos lo golpes, y siempre atacando y cuando uno es capaz de hacer saques a 225 ó 230 te puedes mantener sobre la pista", añadió.
Soderling: "Yo no juego para el público"
El público de la Philippe Chatrier pitó al sueco Robin Soderling cada vez que éste obligó a bajar al juez de silla español Enric Molina a comprobar una marca en la tierra, y al final del encuentro en el que venció al suizo Roger Federer, el escandinavo comentó que él juega para sí mismo, "no para el público".
"No me importa realmente", comentó el de Tibro sobre la actitud de los aficionados. "Juego por mí mismo y por la victoria, no por el público", añadió el sueco, feliz por haber cortado la racha de derrotas, doce en total ante Federer. "Estoy contento por ello, por haberle ganado en un Grand Slam y no en un torneo pequeño".
Con esa flema se despachó Soderling tras alcanzar por segunda vez en su carrera las semifinales de Roland Garros, al batir de nuevo a un número uno del mundo, e impidiendo que Federer lograse su victoria 200 en el Grand Slam. "Jugué mucho mejor hoy que el año pasado en la final", dijo Soderling, "siempre es más difícil jugar en tu primera final de un Grand Slam, sin duda", dijo el sueco, que recordó que siempre se sintió inspirado por lo que sus compatriotas hicieron en este torneo años atrás.
"Cuando crecía, había muchos de ellos buenos en el circuito. Les veía y me inspiraron. Ojalá yo pueda hacer lo mismo con los niños en Suecia ahora", señaló. "Esto es una gran victoria pero no es la final, no puedo celebrar mucho todavía porque tengo al menos un partido por lo menos, y tengo que estar concentrado en ello", dijo Soderling.