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Tómate un respiro, juega Brasil

  • En algunas empresas incluso se reunirán para ver el a la 'Canarinha'
  • Los funcionarios también reducirán su jornada los días de partido
  • Ver también: Especial Mundial 2010 | Todo sobre la selección de Brasil

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Las calles de Río de Janeiro se decoran con motivo de la cita mundialista de Sudáfrica.
Las calles de Río de Janeiro se decoran con motivo de la cita mundialista de Sudáfrica.

Que el fútbol en Brasil levanta pasiones es algo conocido.  Cada vez que la pentacampeona del mundo juega un partido el país practicamente se paraliza, por ello la tercera parte de las empresas brasileñas liberará de sus obligaciones a sus empleados durante los partidos que Brasil dispute en este Mundial.

Así al menos lo han señalado el 34% de las empresas encuestadas por la consultora de recursos Humanos Curriculum.

En este sondeo, en el que han participado 1.090 empresas, los responsables de las mismas han señalado que, al menos, durante los 90 minutos que dura un partido, los empleados podrán ver el encuentro por televisión.

Asimismo, el 13% de estas compañías ha apuntado que planean reunir a sus trabajadores en las mismas instalaciones de trabajo y promover así una mayor integración laboral con los compañeros.

Una decisión acertada según el presidente de Curriculum, Marcelo Abrineri, que ha señalado que "Brasil se paraliza cuando la selección disputa partidos , entonces lo mejor que pueden hacer las empresas es aprovechar el momento y ofrecer una reunión de integración a un costo muy bajo", ha asegurado.

Además de las empresas, las escuelas y universidades públicas y privadas también tendrán horarios especiales durante los días que Brasil dispute sus encuentros.

Los funcionarios también pararán de trabajar

El Gobierno, además, ha establecido por decreto un horario extraordinario para los organismos públicos federales en los días de partido.

Según este decreto, cuando la selección brasileña tenga encuentros previstos para las 15.30 hora local, los funcionarios públicos podrán terminar su jornada e irse a sus casas una hora y media antes.

Los días en que el partido de Brasil sea a las 11.00 hora local, suspenderán temporalmente sus labores media hora antes del encuentro y deberán volver a su puesto de trabajo una hora después de finalizado el partido.

Con este horario especial, del que están excluidos los hospitales públicos, el gobierno pretende tener contentos a sus trabajadores, ya que en Brasil el fútbol es mucho más que el deporte nacional.