Enlaces accesibilidad

Pau Gasol, el gigante de Sant Boi

  • Pau Gasol ha demostrado ser el mejor jugador español de la historia
  • Sus medidas son 2,15 metros de altura, 120 kilos de peso y un 50 de pie
  • La gloria y el mayor reconocimiento le han llegado con Los Angeles Lakers
  • Junto a los anillos, un Mundial, un Eurobasket, una plata olímpica y dos ligas

Por
Gasol se ha convertido en el primer español en lograr dos anillos de oro de la NBA.
Gasol se ha convertido en el primer español en lograr dos anillos de oro de la NBA.

Todos sabían que Pau iba a llegar lejos en el mundo del baloncesto, pero nadie podía imaginarse que se convertiría en el primer español en ganar dos anillos de la NBA ni, mucho menos, en una estrella que ha eclipsado a algunos super-jugadores de la mejor liga del mundo.

El año pasado le tocó a Dight 'Superman' Howard, de los Orlando Magic, y en este Pau ha tenido la oportunidad de vengarse de su ídolo de juventud, Kevin Garnett, de los Boston Celtics.

Incluso Aíto, uno de los sabios de este deporte, que vio en él unas grandes cualidades, también se quedó corto con él: "Tiene técnica para jugar de uno y de dos, pero no puede jugar de cinco porque le falta peso", afirmaba el técnico cuando lo tuvo a sus órdenes en el Barça.

Sus cifras intimidan: 2,15 metros de altura, 118 kilos de peso y un número de pie de 50. Sus números marean: 18 puntos, 10 rebotes y cuarenta minutos de media en los 103 partidos que ha disputado esta temporada.

Normal que nadie fuera capaz de imaginar estos datos superlativos cuando el "pequeño" Pau empezó a jugar con siete años en el Colegio Llor de su Sant Boi de Llobregat natal. Sus privilegiadas cualidades se unieron a un trabajo impecable en su formación de base.

"Empecé a jugar disfrutando, porque me encantaba el baloncesto. Pienso que ahí está la clave de todo buen jugador. En sentir pasión por lo que haces", declaró Gasol a TVE en una entrevista.

Esa pasión desenfrenada por el baloncesto no le hizo perder la cabeza. En su familia, su padre, enfermero, y su madre, médico, siempre se preocuparon porque su colosal altura no le impidiera tocar con los pies en el suelo ni descuidar su formación intelectual.

Pero era evidente que Pau había nacido para triunfar en el baloncesto. El de Sant Boi deslumbró al mundo junto con la generación de los 'Juniors de Oro' con la que triunfó en el Mundial de 1998. Un año después debutaría con el Barcelona en Cáceres y, tras un periodo como aprendiz en los banquillos, se destaparía en la temporada 00-01, en la que el Barcelona logró la Liga y la Copa y él se proclamó como MVP en ambos torneos.

El exitoso y duro camino a la NBA

En la temporada 2001 se convirtió en el segundo español en jugar en la NBA tras Fernando Martín, yendo a Memphis, donde jugó seis temporadas.

La adaptación a Memphis no fue fácil, aunque desde el principio aportó buenas estadísticas para su equipo. Sus padres, Agustí Gasol y Marisa Sáez, dejaron su vida en Catalunya e hicieron las maletas junto con su hijo mediano, Marc, y el pequeño, Adrià, para acompañar a su hijo a la ciudad del Estado de Tenesse.

La familia Gasol tuvo que abrirse paso en un ambiente hostil. Pau era sólo un 'rookie' (novato) europeo que acababa de llegar a la NBA y que no había demostrado nada.

Pero, en breve, Estados Unidos descubrió su talento y el resto del mundo también. Su imparable juego y su intimidatoria altura le permitieron proclamarse Campeón del Mundo en 2006 ante Grecia.

La etapa dorada en Los Ángeles

En febrero de 2008, los Lakers lo ficharon para que ganara el 'anillo' haciendo de escudero a Kobe Bryant.

Las cosas no le fueron nada mal esa temporada. Pero a Gasol le quedó la espina clavada de haber perdido la final de la NBA ante los Boston Celtics, un tropiezo que ni el MVP en los Juegos Olímpicos, ni la medalla de plata pudieron hacer olvidar.

El primer 'anillo' era sólo cuestión de tiempo. Pau ya había superado retos más complicados y el torneo de la NBA no se le iba resistir al gigante de Sant Boi. El resto ya es historia del mejor baloncesto español.