España se ha hecho mayor
- España ha sabido madurar el partido
- Ha mantenido la concentración después de un 'minuto loco'
- Tenemos calidad y mentalidad
- La selección española, en semifinales tras vencer a Paraguay (1-0)
- Ver más: Mundial de Sudáfrica 2010 | Así te hemos contado el partido
España definitivamente ha conseguido ser un equipo ganador en diferentes circunstancias, y eso es lo que nos está haciendo disfrutar de estos momentos históricos de la selección española. [Crónica del Paraguay - España] [Así te lo hemos contado]
Bien es verdad, que nuestra caracteristica que nos delimita con el resto de equipos es la del trato del balón, la de un estilo que hace que seamos reconocibles en cualquier campo y en cualquier partido. Pero no es menos verdad que con esto sólo no basta para optar a grandes títulos y a grandes campeonatos. Y es ahí donde España ha dado el estirón definitivo, siendo un equipo capaz de defender con orden, intensidad y personalidad, lo que en determinados partidos no puede conseguir con su mayor arma, que es el famoso toque de balón.
Siempre hemos aducido a la mala fortuna, a la falta de recursos en ese otro futbol que no se ve, en definitiva al no manejo de circunstancias imprescindibles para ser campeón. Pero esta generación ha cambiado la historia, ha abrazado con pasión su estilo de juego pero sin dejar de crecer en los aspectos que estamos comentando, consiguendo ser definitivamente el mejor grupo de jugadores de toda una historia futbolística española.
Si echamos la vista atrás en este Mundial y vemos las dificultades que el equipo español ha sido capaz de superar, nos damos cuenta que no hubiera sido capaz si no habláramos de un grupo con carácter, peronalidad, calidad e infinita confianza en sus posibilidades, unido a una, para mí, magnífica gestión de Vicente del Bosque en momentos donde no era nada fácil.
Por eso, me remito al titular del artículo, diciendo sin nigún tipo de dudas que España se ha hecho mayor y que opta, con todo merecimiento, al título Mundial de este campeonato. Ahí es nada.