Costa: "Los jugadores se han adaptado muy bien a la pista"
- El capitán español de la Davis califica como clave la tranquilidad
- Albert Costa pronostica una "igualada" jornada de viernes
- Francia - España en La 2 y RTVE.es (viernes, 13:00h; sábado, 14:00h)
El capitán español de Copa Davis, Albert Costa, se mostró muy satisfecho del "proceso de adaptación" de los jugadores nacionales antes de comenzar este viernes (13.00 horas), en Clermont Ferrand, la eliminatoria de cuartos de final ante Francia, un cruce "complicado" dado el nivel del rival y el hándicap de jugar como visitante.
"La eliminatoria va a ser muy complicada. Francia es uno de los conjuntos más complicados que hay, pero vamos a intentar estar al cien por cien para vencer. Los jugadores han hecho un gran trabajo en su proceso de adaptación a la pista, que es muy rápida", dijo.
Asimismo, el catalán aseguró que "la experiencia" de todos sus pupilos le ha dificultado la selección de los dos primeros encuentros de este viernes, que medirán al alicantino David Ferrer contra Gael Monfils y al madrileño Fernando Verdasco frente a Michael Llodra.
"Los dos jugadores (Ferrer y Verdasco) tienen mucha experiencia, pero ha sido una elección muy difícil porque todos estaban bien adaptados. Tanto Nico (Almagro) como 'Feli' (López) están entrenando bien, pero hay que mirar toda la eliminatoria y pensar que todos los jugadores pueden tener su papel", anunció.
La "tranquilidad", clave
Por su parte, Costa pronosticó que la jornada de viernes será "muy igualada". "Los dos partidos van a ser muy igualados. Da igual quién comenzase. Tengo el convencimiento de que Ferrer puede ganar el primer punto, pero si pierde, Fernando (Verdasco) que darlo todo para igualar la eliminatoria", señaló.
Por otro lado, el capitán español calificó como "clave" la "tranquilidad" para abordar su primer cruce como visitante desde que llegase a su cargo. "En casa es todo a favor, con la gente de tu lado. Aquí cambia la cosa bastante, pero intentaré que a los jugadores no les afecte", afirmó.
Por último, el que fuera campeón de Roland Garros en 2002 volvió a incidir en "la sorpresa" que causó la elección de la sede de Clermont-Ferrand. "El pabellón está muy bien. Lo malo es el hotel, que está un poco lejos. Aunque aquí cada federación puede escoger el lugar que quiera en favor de sus intereses", zanjó.