El Barça se atasca en casa

• Empate de los azulgranas ante el Mallorca (1-1)
• Los de Guardiola perdonaron numerosas ocasiones
• Messi recibió la Bota de Oro en el prólogo
• Datos y estadísticas del partido

Messi hizo el único tanto del Barça ante el Mallorca

Ficha técnica:

1 - Barcelona: Valdés, Alves, Piqué, Abidal, Milito (Jeffren, min.89), Mascherano, Iniesta, Keita (Thiago, min.66), Pedro (Nolito, min.77), Bojan y Messi.

1 - Mallorca: Aouate; Ratinho, Crespí, Ramis, Kevin, Nsue, Martí, De Guzmán, Joao Victor; Castro (Pereira, min.70) y Cavenaghi (Webo, min.46).

Goles: 1-0: Messi, min.21. 1-1: Nsue, min.42.

Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio navarro). Mostró tarjeta amarilla a Kevin (min.13), Webó (min.52), Aouate (min.59), Castro (min.65), Ratinho (min.85) y Pereira (min.86).

Incidencias: Partido de la sexta jornada de Liga disputado en el Camp Nou ante 79.085 espectadores. Antes del encuentro se reunió un homenaje al 'Barça de las 5 Copas' y se guardó un minuto por uno de sus componentes, Eduardo Manchón, recientemente fallecido.

Lionel Messi ofreció a la afición la 'Bota de Oro' que le acredita como el máximo goleador de las Ligas europeas de la temporada 2009-2010.

El FC Barcelona no ha empezado cómodo esta Liga en el Camp Nou. Los vigentes campeones cedieron un empate (1-1) ante el Mallorca en casa, después de haber perdonado un sinfín de ocasiones en la primera parte. (Datos y estadísticas del partido)

Leo Messi, que fue homenajeado antes del inicio del partido por su Bota de Oro, adelantó a los azulgranas en lo que parecía que iba a ser un festival de goles. pero a los pocos minutos del descanso Nsue logró el empate rematando de cabeza un córner.

Guardiola vio además crecer los problemas en forma de bajas con la inoportuna lesión de Pedro en la segunda mitad. La escasez de efectivos por una u otra razón -Xavi está lesionado y Villa cumplía sanción- obliga al técnico a echar mano de la cántera, con lo que Thiago, Nolito y Jeffren tuvieron su oportunidad en los cambios.

Pero los once que salieron de inicio, con Keita, Mascherano e Iniesta en la medular, parecieron funcionar a la perfección en los primeros compases.

Las ocasiones de los locales llegaban en oleadas y el Mallorca se veía incapaz de contener a los barcelonistas. El reencuentro entre Laudrup y Guardiola -la primera vez que se enfrentan los dos compañeros del 'Dream Team'- parecía que iba a ser amargo para el danés.

Messi daba la sensación de estar plenamente recuperado y amenazaba con ser la auténtica pesadilla de los bermellones, en esta ocasión de blanco. El Bota de Oro europeo cumplió su amenaza a los 20 minutos con un gran gol. El argentino la ajustó con rosca después de recibir un gran taconazo de Pedrito.

La primera parte era un monólogo del Barça y todos gozaban de ocasiones para marcar, incluido el lateral francés Abidal, que nunca se ha estrenado en competición oficial.

Uno de los que fallaba era Bojan, pero el público se lo perdonaba mientras el marcador era favorable. El Mallorca apenas la tocaba, tan sólo un sonrojante 10% de posesión, pero un balón largo fue puesto de tijera por Cavenaghi al 'Chori' Castro y el empalme de éste obligó a Valdés a sacar sus primeras manos.

En el siguiente saque de esquina llegó la sorpresa. Nsue entró con todo y dejó en evidencia a la zaga blaugrana. Saltó más que Piqué y Milito y la puso de cabeza a la red (minuto 41).

Pitos en la segunda parte

El Camp Nou creía en los suyos y esperaba una solución favorable en la segunda mitad. Pero el Barça seguía atascándose una y otra vez en el ataque.

Los ánimos a Bojan iban convirtiéndose en murmullos y luego en pitos. El canterano sólo tuvo un tiro al palo como premio, aunque se quedó sin ángulo después de driblar a Auate.

Para colmo, los mallorquinistas empezaron a creérselo y Webo, recién salido, probó fortuna desde lejos después de recoger un fallo en el pase de Gerard Piqué.

Pese a que los de Guardiola no cesaron en su empeño, el gol nunca llegó. Lo que sí ocurrió es que Pedro se lesionó después de quedarse la bota enganchada en el césped y preocupa su estado en una plantilla ya de por sí corta.