Contador no asistirá a la presentación del Tour 2011
- El ciclista prefiere esperar a que la UCI se pronuncie sobre su caso
- "La presentación no es una prioridad", asegura su jefe de prensa
- 'L'Equipe' asegura que hematólogos investigan su pasaporte biológico
El español Alberto Contador, suspendido provisionalmente por presunto dopaje, no asistirá el próximo martes a la presentación del Tour de Francia 2011, a la espera de que la Unión Ciclista Internacional (UCI) se pronuncie sobre su caso.
El jefe de prensa de Contador, Jacinto Vidarte, en declaraciones publicadas por 'L'Equipe' señaló que "si las instancias internacionales no han decidido de aquí al próximo martes", ve "difícil la presencia de Alberto en París".
"Aún estamos a la espera del veredicto de la UCI. Siempre hemos esperado que la decisión se tome antes de la presentación del Tour. Alberto desea que su inocencia sea probada, y que venga de la UCI", explicó Vidarte al diario deportivo francés.
Para el jefe de prensa del ciclista, la presentación del Tour no es una "prioridad" en estos momentos para el que es tres veces ganador de esta competición, ya que se vería expuesto "a una avalancha mediática".
"Su presencia centraría forzosamente la atención del conjunto de los medios de comunicación, y podría perjudicar a la propia presentación" del Tour, comentó.
Vidarte afirmó que Contador prefiere perderse la presentación oficial y poder estar al inicio de la ronda gala en julio de 2011.
Por otro lado, 'L'Équipe' señaló que, además de la investigación que la UCI ha puesto en marcha para saber si es posible que el clembuterol hallado en la sangre de Contador se deba a una contaminación alimentaria, también ha encargado a varios hematólogos de prestigio que analicen el pasaporte biológico del ciclista, para observar los presuntos restos de plásticos hallados en su sangre.
Ello a pesar de que la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) prácticamente descartara la víspera que dichos restos sean una prueba clara de que Contador se aplicara una autotransfusión, como sugería el propio rotativo francés y apoyaba 'The New York Times'.