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El "efecto Mirambell" mete a cuatro españoles en la escuela de pilotos de skeleton

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Miguel Ángel Grau, en una competición de street-skeleton.
Miguel Ángel Grau, en una competición de street-skeleton.

Cuando el pasado mes de febrero el catalán Ander Mirambell desfilaba tras la bandera española en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Vancouver poco podía imaginar que su camino no sólo marcaría su carrera, también la de otros jóvenes. Apenas unos meses después de que un español debutara en competición olímpica en la modalidad de skeleton, otros cuatro españoles acaban de hacer lo propio en la escuela de pilotos de Igls (Austria), donde esperan sacar la licencia de pilotaje de trineos de skeleton y bobsleigh.

"Creo que éste es un gran momento para el deporte de hielo en nuestro país y el skeleton va a tener tirada, ésta es la primera hornada de pilotos y cada año va ir a más, cuando vean que es económico, seguro y espectacular", explicaba el propio Ander a RTVE.es desde Lillehammer, donde se prepara para el arranque de esta temporada.

Días antes de comenzar el curso, algunos de los jóvenes aspirantes a piloto preguntaban a Mirambell dónde y cómo conseguir material. "Ya tengo el mono, ¿me puedes decir dónde puedo conseguir las zapatillas", preguntaba Miguel Ángel Grau, un joven de 23 años, a su "mentor", mediante Facebook.

"Al final ya tengo casco y mono, las zapatillas y el trineo los alquilaremos allí, porque son más fáciles de conseguir y además si no, no me van a llegar a tiempo", relataba Miguel Ángel a RTVE.es unos días antes de marchar, en coche y junto a otro aprendiz de piloto, Eneko Echevarría  -16 años-, hacia Igls. Con ellos viajará también Aleix Alcaraz, tercer español que este año se ha inscrito en la popular escuela de pilotos, así como Esteban Echevarría -padre de Eneko, y que ejerce de entrenador de los jóvenes- y Javier Piquero, que se ha inscrito en la modalidad de bobsleigh.

"¿Qué cómo he llegado a esto?" -preguntaba Miguel Ángel-. "Llevo varios años corriendo en street-skeleton, una modalidad de la federación de deportes de inercia más o menos similar al skeleton, aunque en lugar de deslizarnos sobre el hielo, nosotros lo hacemos sobre el asfalto. Ya estoy acostumbrado a ir con la cabeza a sólo unos centímetros del suelo, la diferencia es que nosotros alcanzamos velocidades punta de 80 km/h y en el hielo pasan con creces los 100 km/h", explica Miguel Ángel, que lo que busca en esta experiencia en la escuela de pilotos es "probar suerte y ver qué tal".

"Yo les diría que disfruten de la experiencia, que hagan caso a los profesores. El peligro recae en querer hacer más de lo que ellos saben y lo demás vendrá sólo, que prueben si les gusta y se enamoran como me pasó a mí, a continuar bajando", les aconseja Ander, que tuvo unos inicios más difíciles que estos jóvenes: unas zapatillas hechas a mano con fibra de vídrio y un casco 'handmade'.

Junto a Miguel Ángel, Eneko y Aleix estará también en la academia de pilotos una mujer, María Montejano, la hasta ahora primera y única española que se ha decidido a probar esta disciplina, y que el año pasado tomó parte en una prueba de la Copa del Mundo de la modalidad. "María ya ha estado en la escuela y tiene potencial, ahora estará en el programa de FIBT de la Copa de Europa, con mi ex entrenador. Eso le permitirá mejorar y afrontar esta temporada con interesantes resultados", dice Mirambell sobre la piloto española.

Y mientras los jóvenes pilotos terminan los preparativos para conseguir su licencia, Ander sigue entrenando en Lillehammer junto a la selección británica de skeleton. "Esto para mí es un paso muy grande en mi preparación, porque antes compartía entrenador con otros países y sobrevivíamos sobre la marcha. Ahora formo parte de una estructura, un proyecto, que aunque tenga matices y no las mismas ventajas, va ser un paso adelante en mi carrera. Es una suerte que CSD, Federación Española deportes de Hielo y ADO hayan podido conseguir un convenio de este tipo", explica Mirambell, que a principios de noviembre se incorporará a la escuela de pilotos como profesor.

De ahí a Vancouver (Whistler) a disputar una prueba de la Copa del mundo, y le seguirán "Calgary (circuito nuevo para mí), Park City, Lake Placid y después de Navidad vendrá la Copa del Mundo de Igls (Innsbruck), Winterberg, St.Moritz, Cesana y el Campeoanto del Mundo de Königssee", explica. "Tendremos skeleton hasta marzo, y ojalá que no sea el único español en el circuito", concluye. ¿El objetivo? Terminar la Copa del Mundo en la vigésima posición.