El colista, ocasión para el Valencia

• El conjunto ché recibe al Zaragoza en Mestalla este sábado
• Los maños, ocasión para resarcirse de dos derrotas seguidas
• Gay pende de un hilo en el banquillo visitante
• Valencia-Zaragoza, este sábado en vivo a las 18:00

Emery: 'Para ganar tenemos que sufrir'

El Valencia tiene la ocasión de resarcirse de dos derrotas consecutivas -Barça y Mallorca- ante un Zaragoza, que llega a Mestalla como colista, que tiene a su entrenador, José Aurelio Gay, pendiente de un fino hilo (sábado, 18:00 en vivo).

La dinámica negativa de los últimos encuentros comenzó a enderezarse el pasado miércoles en el partido de Copa ante el Logroñés (0-3) y la intención del equipo dirigido por Unai Emery es sumar una nueva victoria en la Liga para retomar el pulso a la competición doméstica.

Para este encuentro ante el conjunto maño, Emery realizará diversas variaciones en su once respecto al que ganó en Logroño, a pesar de que las únicas bajas son las del centrocampista francés Sofiane Feghouli, lesionado, y la del portero César Sánchez, a quien los servicios médicos del club han recomendado no forzar su reaparición tras sufrir una microrrotura fibrilar.

Tras la mala imagen ofrecida en el último partido jugado en Mestalla frente al Mallorca, el técnico valencianista es muy probable que opte por jugar con dos puntas en esta ocasión, por lo que Soldado y Aduriz jugarán juntos como principales referentes del equipo.

El internacional turco Mehmet Topal, tras no jugar los dos últimos encuentros por decisión técnica, podría volver al once inicial en lugar de David Albelda.

La vuelta al equipo en el partido de Copa del Rey de Joaquín Sánchez y Miguel Brito, tras recuperarse de sus respectivas lesiones, provoca dudas sobre la titularidad en la banda derecha, donde Bruno Sáltor, como lateral, y Pablo Hernández, como interior, les disputarán el puesto en el once inicial.

Por su parte, el Real Zaragoza, al que la victoria en Copa del Rey frente al Real Betis le ha servido como bálsamo para aliviar la delicada situación por la que atraviesa, espera obtener también su primer triunfo liguero frente al Valencia e intentar salir del farolillo rojo de la clasificación.

El conjunto aragonés, que derrotó el pasado miércoles al Betis por 0-1 en la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey obteniendo su primer triunfo esta temporada, quiere aferrarse a esta victoria para que sirva como rampa de despegue en la competición de la regularidad, en donde continúa sin conocer lo que significa ganar.

Aunque la plantilla zaragocista es consciente de que se venció a un conjunto andaluz plagado de suplentes, el efecto moral, sin llegar a tirar las campanas al vuelo, ha sido la mejor terapia que podía recibir, ya que la que la presión por lograr una primera victoria esta campaña parecía pesarle como una losa.

Liberado de ese agobio, la plantilla que dirige José Aurelio Gay, ha podido esbozar por fin una sonrisa y cargarse de moral para el duelo contra el conjunto valenciano, ante el que espera romper el maleficio en la competición liguera.

Además, haber ganado en el Benito Villamarín ha restado presión, no solo a los jugadores sino al técnico, que según los rumores no confirmados por la cúpula directiva del club tenía crédito para los encuentros de la pasada jornada contra el F.C. Barcelona, en el que se perdió, y frente al equipo de Unai Emery.

El triunfo copero parece que podría hacer variar dicha situación, aunque todo dependería, no sólo del resultado en Mestalla, sino de cómo se produjera y de sus circunstancias.

En el plano deportivo, Gay tendrá para este encuentro las ausencias de los lesionados de larga duración Uche y Laguardia, así como del francés Sinama Pongolle, también en el dique seco.

Por contra, recupera para este enfrentamiento al argentino Leo Ponzio, una vez cumplido frente al Betis el partido de sanción con el que fue castigado por su expulsión contra el Barcelona.

Es más que probable que el técnico zaragocista mantenga el esquema 5-3-2 que ha puesto en juego en los tres últimos encuentros, con la entrada de Matteo Contini por su compatriota Maurizio Lanzaro en el centro de la zaga, con Ponzio ocupando la posición del húngaro Adam Pinter y de Ander Herrera en lugar de Jorge López.