Cura de humildad blanca en San Siro

• El Real Madrid dejó escapar inexplicablemente un partido que tenía encarrilado
• El rival era un Milan en el que la vieja guardia sigue siendo el único recurso
• El supuesto mejor árbitro del mundo, Howard Webb, volvió a ser determinante
• Crónica del Milan 2-2 R. Madrid | Así lo hemos narrado | 'Mou': "Tengo suerte"

Webb volvió a ser protagonista

Ya lo había avisado Mourinho antes del partido del Bernabéu contra el AC Milan, el peligro del equipo lombardo se llamaba Filippo Inzaghi. El veterano delantero italiano (37 primaveras a su espalda), entró en el campo en el minuto 59 y revolucionó el partido como nadie hubiera podido imaginar. [Crónica del partido]

Pero la conclusión que se debe extraer de esto es que si el Real Madrid quiere alzar su novena ‘orejuda’, no puede permitir que un partido que tiene encarrilado se le escape de esta manera. [Narración minuto a minuto del partido]

Esta vez era el Milan, posiblemente el equipo ‘rossonero’ más atemorizado al que se haya enfrentado el Madrid en la historia, pero en otra ocasión el rival será el Chelsea, el Inter o el Barça y la posibilidad de rescatar un empate será infinitamente menor.

El Madrid hizo una primera parte para enmarcar, en cambio los de Allegri demostraron desde el primer minuto de juego que todo su potencial se basaba en buscar la espalda de la defensa blanca mediante balones largos. En ningún momento dio muestras de ofrecer algo diferente y cuando salió Inzaghi tan sólo se necesitaba estar un poco más atentos a esos balones.

No se hicieron bien los deberes por parte de la dupla portuguesa Pepe-Carvalho y el más listo de la clase se aprovechó para lograr dos nuevos goles y llegar a la cifra de 70 goles europeos, 46 en la máxima competición.

Sirva como dato que el técnico blanco sustituyó por segunda vez consecutiva a Pepe después de los goles de ‘Pippo’ y más que como un recurso táctico, el cambio pareció un tirón de orejas hacia su compatriota.

Howard Webb y los actores secundarios

Mención aparte merece el ya ‘árbitro maldito’ -por lo menos en España- Howard Webb. Que falle el ‘trencilla’ es algo que, por mucho que trabajen ‘Mou’ y los suyos en Valdebebas, nunca se podrá controlar y en esta ocasión el marcador podría haber sido otro sin una actuación arbitral tan paupérrima.

El que para la FIFA es el mejor colegiado del mundo dejó que el partido se le escapara de las manos en la parte final por culpa de su permisividad con los italianos (como Abate y Gattuso) y, por supuesto, por el tanto concedido que puso por delante a los italianos, gol en claro fuera de juego. En cada balón disputado durante los últimos diez minutos de partido más el descuento, se sacaban a pasear codos, rodillas, pies, etc. por parte de cada bando sin que nadie lo impidiera.

Por actores secundarios se entiende a aquellos jugadores que sin ser los llamados a sacar las castañas del fuego, lo han hecho cada vez que se les ha pedido. En Alicante fue Benzema el que colaboró de manera notable en la remontada y contra el Milan fueron el francés y Pedro León los que fabricaron el gol del empate en el descuento. Seguro que Mourinho se lo habrá apuntado en su libreta.

Pese a todo, el Real Madrid tiene el pase a la siguiente ronda certificado y la primera posición del grupo casi atada. Habrá que ver en un futuro no muy lejano como se desenvuelve cuando el rival sea uno de los llamados grandes de Europa.