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Thiago Alcántara, un as en la manga de Guardiola

  • Se trata de un futbolista "atrevido, descarado y muy ambicioso", dice Guardiola
  • Es hijo del fútbolista Mazinho y de la jugadora de voleibol, Valeria Alcantara
  • Ante el Ceuta, el canterano ha demostrado que es un jugador con proyección

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La otra familia Alcántara, la futbolista

Asegura Pep Guardiola que "tiene una calidad un poco diferente a muchos jugadores de la plantilla", dice el técnico que se trata de un futbolista "atrevido, descarado y muy ambicioso".

Habla de Thiago Alcántara, la última gran aparición de un jugador de la factoría de La Masía, un jugador diferente que llama a las puertas del primer equipo a base de clase y creatividad, capaz de asociarse con el mismísimo Leo Messi y cuya progresión no parece tener techo.

Hijo de un campeón del mundo: Mazinho

Thiago Alcántara do Nascimiento (Bari, 1991) lleva el fútbol en los genes. Es hijo de Mazinho, campeón del mundo con Brasil en 1994, al que ha considerado como "su ídolo de siempre". Se trata de un competidor nato, de los que apunta a lo más alto desde que empezó a jugar de pequeñito en el Flamengo.

Nacido en Bari (Italia), en la etapa en la que su padre jugaba en las filas del Lecce, Thiago vivió unos cuantos años de su infancia en Brasil junto con su madre, Valeria Alcántara, una jugadora de voleibol.

Después, cuando Mazinho fichó por el Valencia, la familia se trasladó a España. De Valencia a Vigo, donde Thiago empezó a jugar en el Val Miñor Nigrán. Despuntaba tanto, lo hacía tan bien, que los grandes del fútbol español se interesaron por él.

La familia eligió Barcelona como destino final. Con catorce años firmó una ficha con el cadete B. Después pasó al equipo juvenil y en la campaña 2007-08, Pep Guardiola, entrenador del equipo filial, le empezó a dar minutos.

Y poco a poco, Thiago fue creciendo. El menudo jugador ya destacaba por su visión de juego, su regate y su llegada, un cromo que el Barça no tiene repetido, algo que no pasó inadvertido por los técnicos barcelonistas.

Pep le dio un 'toque' de atención

Debutó con el primer equipo con dieciocho años. El 17 de mayo de 2009, un intrascendente partido contra el Mallorca que él nunca olvidará. En febrero de 2010, marcó su primer y hasta ahora único gol con el primer equipo, fue ante el Rácing de Santander.

Lo celebró con tanta euforia, abrazándose con Jonathan dos Santos, que Guardiola se molestó. "Estas cosas no se pueden hacer a su edad. Con 30 años sí. Debe abrazarse con sus compañeros y seguir trabajando. Le tendremos que bajar un poco los pies al suelo", dijo entonces el entrenador.

Le tendremos que bajar un poco los pies al suelo

Ante el Ceuta, Thiago Alcántara ha demostrado que es un jugador a tener en cuenta. Si Jonathan dos Santos parece estancado en su juego, Thiago le da brillo al juego de sus equipos y va dando pasitos en pos de su consolidación.

Le costará a Thiago entrar en un equipo que lo ha ganado todo y con una alta densidad de jugadores talentosos, pero cuenta con el aval de Guardiola, el técnico que lo subió del juvenil al filial y que después le dio la alternativa en el primer equipo.

Guardiola sigue con Thiago la didáctica del palo y la zanahoria; la misma que ha utilizado con otros canteranos. Le puede afear una actitud puntual, pero después no tiene inconveniente en alabarle: "a veces hace cosas que piensas, !uff, lo que ha hecho!".

Guardiola apuesta por la cantera

Alcántara es el último futbolista destacado, pero no es el último de la lista. Desde que Pep Guardiola se hizo cargo de la primera plantilla, hasta catorce futbolistas de la cantera han debutado con el primer equipo.

El primero fue Sergio Busquets y el último Sergi Roberto, que se estrenó anoche frente al Ceuta. Por el camino, han recibido la alternativa Abraham González, Xavi Torres, Marc Muniesa, Andreu Fontàs, Jonathan dos Santos, Gai Assulin, Jonathan Soriano, Marc Bartra, Oriol Romeu, Sergi Gómez, Rubén Miño y Nolito. "No hay mayor éxito que subir a un joven de la cantera. Más que ganar un título", dijo Guardiola antes del partido del Ceuta. Una idea que resume su decidida apuesta por los jóvenes.