El Barcelona impone su calidad ante el Blancos de Rueda con un rácano marcador
- El Blancos de Rueda tuteó al Barça hasta el último cuarto pero perdió (55-65)
- Los pucelanos no pudieron contrarrestar la visión de juego de Ricky Rubio
- El marcador muestra que los dos equipos estuvieron rácanos en ataque
El Barcelona, con más dificultades de las previstas, terminó imponiendo su calidad en un partido marcado, desde el primer minuto, por las defensas y, aunque el Blancos de Rueda tuteó a los catalanes hasta el último cuarto, no pudo contrarrestar la visión de juego de Ricky Rubio. [Datos y estadísticas del Blancos de Rueda Valladolid 55 - Regal Barcelona 65].
Los vallisoletanos demostraron, desde el saque inicial, que no estaban dispuestos a poner las cosas fáciles al Barcelona y, a través de una seria defensa, impusieron el control en el juego para obtener una primera renta de ocho puntos (13-5) en el minuto 6, que obligó a Xavi Pascual a solicitar su primer tiempo muerto.
El Blancos de Rueda se mostró muy sólido en el juego interior, consciente de que en esa faceta el conjunto catalán estaba más que sobrado y supo contrarrestar la altura de los jugadores blaugrana con orden y solvencia, lo que les permitió seguir manejando el ritmo del partido y ampliar las diferencias (17-5).
Un último tiro libre de Ingles establecería el 17-6 con el que finalizó el primer cuarto, donde sólo hubo un equipo en la cancha: el Blancos de Rueda, que supo disfrutar de su juego y encararse al actual número uno de Europa.
El Barça aumentó la presión defensiva, lo que impidió a los locales lanzar con comodidad. Además, Ndong comenzó a hacer valer su poderío en la pintura y eso permitió a su equipo recortar la ventaja de los vallisoletanos (19-12, min.14), que Fisac intentó frenar con un tiempo muerto.
Ricky Rubio llevó la batuta
Y desde luego fue efectivo porque, en dos minutos, el Blancos de Rueda conseguía situarse a 14 puntos (26-12), que forjaron a través de la encomiable lucha de Báez y Barnes en la zona. Pero entonces el Barça reaccionó y encontró en Grimau el revulsivo necesario para parar a los vallisoletanos y dejar la renta en cinco puntos (30-25) antes del descanso.
El conjunto local mantuvo su filosofía de juego, pero el acierto comenzó a abandonarles -terminaron con un paupérrimo 30 por ciento en tiros de dos-, mientras que el cuadro blaugrana supo hacer valer la calidad de jugadores como Ricky Rubio y la neta mejoría defensiva para comenzar a sitiar al rival (40-39, min.27).
Con el aliento del Barça en el cuello, merced sobre todo a la capacidad de manejar la batuta de Rubio, ya era difícil recuperarse pero, aún así, y sin guía en el juego, el Blancos de Rueda fue capaz de mantenerse por delante en el electrónico al final del tercer cuarto (45-43).
Poco tardarían los catalanes, de la mano de Grimau, en dar la vuelta al resultado, adverso hasta ese momento (45-48) y en comenzar a enterrar las esperanzas locales, a base de un juego organizado y bien coordinado por Rubio, principal protagonista de la progresión de su equipo.
A pesar del receso de Fisac, los vallisoletanos ya habían entrado en una dinámica de fallos, errores en los pases y precipitación en el juego, que les impediría ya cualquier tipo de reacción ante un Barcelona más seguro y confiado, al que no le costó rematar para lograr la victoria (55-65).