Enlaces accesibilidad

Nadal: "Es verdad que parece que no hay recambio en el tenis español"

Por
Nadal en un descanso de su primer partido en la pista de Melbourne.
Nadal en un descanso de su primer partido en la pista de Melbourne.

Rafael Nadal, número uno del mundo, emprende en Melburne, la conquista del Abierto de Australia, que ya conquistó hace dos años tras imponerse al suizo Roger Federer, que, además de suponer su décimo título del Grand Slam, le situaría como el tercer hombre en toda la historia, tras el mítico australiano Rod Laver y el estadounidense Don Budge, en conquistar los cuatro 'major' de forma consecutiva.

Este año ha sido especialmente intenso. Si ya de por sí tus vacaciones son reducidas, en este la intensidad se ha acentuado. El Masters de Londres, los partidos de exhibición con Roger Federer y ahora, aquí en Australia, vuelta a empezar.

"Evidentemente, el tenis, por el calendario, es así. Es una jornada continua. No se puede valorar que haya un parón largo. Dos semanas y media de descanso es lo que hay. Este año no he podido parar a descansar para recuperarme y volver a empezar a jugar. Si todo va bien, después de jugar aquí me voy a tomar un mes para trabajar más tenísticamente y físicamente".

Llega el Abierto de Australia con una motivación añadida. Hacer algo más de historia con la conquista del cuarto Grand Slam consecutivo. Uno siempre dice que no piensa en retos de este tipo. Pero no piensas, en ese tiempo de relax, tranquilamente, en la posibilidad de alcanzar algo fuera del alcance de la mayoría de los grandes de la historia del tenis?

"Lo único que me planteo es jugar bien cada día. Encontrar la sensación adecuada para hacer un gran torneo. No me planteo ganar el cuarto seguido porque está todavía muy lejos y es difícil empezar a valorar esa posibilidad. Pero hay que seguir trabajando día a día y solo así tendré la posibilidad de hacer un buen torneo".

El Abierto de Australia ya forma parte de tu palmarés. Fue tuyo hace dos años. En esa edición recordada por el épico partido con Fernando Verdasco en semifinales y las lágrimas de Roger Federer tras perder la final contigo. ¿Con qué sensaciones vuelves? ¿Qué recuerdos tienes de entonces?

"Este es un torneo del que tengo grandes recuerdos desde la primera vez que vine y jugué con Lleyton Hewitt en la pista central. Después también cuando jugué un año después, en el 2005, también con Hewitt, un partido intenso a cinco sets". "Y después, claro, la semifinal del 2009 que fue un partido realmente bonito. La semifinal con Fernando Verdasco. Los dos jugamos muy bien. Nunca en mi vida le he visto jugar así. Y después la final con Federer, que acabó de manera dramática. Es el recuerdo de un triunfo que no hubiera esperado nunca por como estaba antes de la final. Acabó con las lágrimas de Roger Federer. No fue un momento agradable pero es parte del deporte".

¿Tú has llorado alguna vez después de una derrota?

"Sí. Bastantes. Bueno, bastantes, tampoco. La final de Wimbledon del 2007, por ejemplo, llegué al vestuario y estuve media hora hecho polvo. Menos mal que luego aguanté fuera".

¿Como es Nadal después de una derrota? ¿Necesitas estar solo, aislarte? ¿Eres el típico que se pone insoportable durante un rato?".

"No, qué va. La verdad es que estoy un pelín tocado pero no me suelen afectar muchísimo las derrotas. En lo anímico, por mi forma de ser no estoy insoportable ni me gusta quedarme solo. Si es un partido importantísimo, me quedo un pelín chafado. Pero es deporte. A veces ganas y otras pierdes".

Ya conocemos tu opinión sobre el 'Balón de Oro'. Pero, quería saber si después de esto, tienes la sensación de que a los deportistas españoles, sobre todo en deportes de equipo, especialmente en fútbol, les cuesta ser reconocidos fuera de España. Que cuesta asumir su gran nivel?

"No, no lo creo. El deporte español tiene un reconocimiento grandioso alrededor del mundo y muchos países nos tienen una envidia sana. Está claro que éste era el momento adecuado para habernos dado el Balón de Oro. Me hubiera encantado que se lo hubiera dado a Xavi o Iniesta. Sobre todo a Xavi por su trayectoria. Iniesta me parece un chico excepcional y buenísimo. Pero el año pasado estuvo mucho tiempo lesionado".

"Messi es impresionante, de lo mejor que se ha visto en los últimos tiempos. No se puede decir nada en contra de su premio. Lo único, que ojalá lo hubieran dado a un español. Pero no se le puede reprochar nada a Messi".

El asunto del dopaje está amenazando últimamente al deporte español. Están amenazados nombres ilustres de nuestro deporte. La sensación en la calle, en muchos casos sobre todo, es de decepción. Como que se les ha caído un ídolo. ¿Te ha pasado esto a ti? Ha habido algún deportista de estos del que hayas pensado o dicho "Qué palo...".

"Hasta que no se comprueba todo no me gusta meterme. Evidentemente supone un palo para España. Sobre todo para la imagen de los deportistas de España. Algo que nos hace daño a todos. Es desagradable, pero creo que es lo que hay. Y a partir de ahí, lo que se puede pedir es que la gente se cuide con corrección porque se hace daño a la imagen del país. Y al final estas cosas nos duelen un poquito y hacen que los deportistas tengan una imagen un pelín peor".

Hemos comentado la intensidad de cada año. Un ir y venir permanente. Sin descanso. Ha habido algún momento a lo largo de estos años en el que hayas pensado o te hayas planteado poner un límite de tiempo a tu carrera. En pensar: 'un par de años más y ya está...'.

"Soy feliz con lo que hago y esto se acabará cuando deje de serlo. Me siento un súper afortunado por vivir todo lo que estoy viviendo. Valoro lo que tengo, que es mucho más de lo que hubiera soñado en toda mi vida. A partir de aquí, dure lo que dure esto tengo que disfrutarlo al máximo".

El tenis español vive una etapa gloriosa. Pero hay vida en el tenis español después de esta generación que lideras?

"No lo sé exactamente. Es verdad que parece que no hay del todo recambio. Confiamos en la tradición que hay en nuestro país. Yo espero que vengan tenistas y deportistas. Se hablaba de Carlos Boluda o de Javier Martí. Pero no sé cómo han evolucionado. Espero que les veamos pronto por aquí. Pero hay que esperar y dar tiempo a todos".