El Baskonia se complica el liderato y el Unicaja la clasificación
El Caja Laboral y el Unicaja de Málaga han cosechado sendas derrotas en la cuarta jornada de la Euroliga y se han complicado su futuro en la competición. Los vitorianos pierden enteros en su lucha por el liderato y los malagueños dicen casi adiós a los cuartos de final.
El Caja Laboral ha dilapidado sus opciones de terminar primero del grupo en el Top 16 de Euroliga tras ceder una agónica derrota en la pista de Panathinaikos por 76-74. Los vitorianos tuvieron en las manos de San Emeterio la posibilidad de forzar la prórroga, pero el cántabro erró los dos tiros libres cruciales que hubieran llevado al partido al tiempo añadido. [Caja Laboral 76-74 Panathinaikos]
Los de Ivanovic se quedan a una victoria de los griegos y deberán esperar un error de Panathinaikos si quieren lograr el billete para los cuartos de final como primeros de grupo. Caja Laboral sobrevivió con seis triples en un primer cuarto en el que fue incapaz de anotar una canasta de dos puntos. Desde el perímetro capeó un parcial de 11-0 que disparó a Panathinaikos 14-3 en los primeros cinco minutos.
Los cuatro triples de San Emeterio, unidos a los de Logan y Huertas sirvieron para contener a los griegos en el minuto diez, 21-18. Después de catorce minutos Batista logró la primera canasta de dos de un Caja Laboral que se aferró a acciones individuales para no salirse del partido antes de tiempo.
Once puntos de Logan en el segundo acto fueron cruciales para mantener a los vitorianos y un triple de Teletovic les puso por delante de forma efímera, 36-39 en el minuto diecinueve, aunque Panathinaikos se fue al descanso con una mínima renta, 40-39. La reanudación arrancó sin que ninguno consiguiera despegarse hasta que los de Ivanovic se desconectaron tres minutos castigados por Panathinaikos con un 10-0 en contra y que abrió el marcador 55-46.
Caja Laboral arrancó el cuarto decisivo nueve puntos por debajo, 59-50, y en dos minutos llegó a situarse a solo uno de un desorientado equipo griego.
La dirección de Huertas y el acierto anotador del brasileño, doce puntos, le permitieron llegar con aspiraciones de triunfo a la jugada final, tras dos tiros libres del base, 74-74. Batiste sentenció finalmente con otros dos lanzamientos, pero San Emeterio tuvo en sus manos la posibilidad de forzar la prórroga y llegó el crucial error en el momento más inoportuno.
El Unicaja entierra sus posibilidades
El Unicaja, por su parte, tiene muy difícil clasificarse para los cuartos de final, tras perder contra el Lietuvos Rytas, aunque el basket average le es favorable, en un partido muy igualado, que se decantó a favor de los locales en los últimos cinco minutos. [Lyetuvos Rytas 70-65 Unicaja]
El partido, según lo presenciado hace unas semanas en el Martín Carpena, se iba a resolver por pequeños detalles. La igualdad fue la nota predominante durante los dos primeros cuartos. El equipo malagueño supo frenar a uno de los mejores jugadores del Lietuvos Rytas como el base estadounidense El-Amin y fue superior en el juego interior con los pívots Robert Archibald y Nednaz Sinanovic.
A pesar de tener superioridad el Unicaja en algunas facetas del juego, el conjunto lituano basó su poder en lo ofensivo con un estelar, el alero Gecevicius, lo que provocó la igualdad a 17-17 en el minuto 10. No había diferencia entre los dos equipos, similares, parecidos y con el mismo miedo a perder.
Los minutos transcurrían y el marcador continuaba parejo hasta el descanso, donde los locales tomaron una ligera ventaja 39-35, por el bajón físico mostrado por el Unicaja, que realizó una presión defensiva muy importante. Estos números no invitaban a nada favorable, porque se veía el bajón físico del Unicaja. Llegó en el tercer cuarto con sólo cuatro puntos en seis minutos 51-39, minuto 26. El Lietuvos Rytas mejoró sustancialmente en ataque y en defensa, donde erraba el conjunto malagueño, que no encontraba la manera de desbordar a los lituanos.
Con la máxima ventaja, el Lietuvos Rytas se acomodó y el Unicaja, que no había existido hasta esos momentos comenzó la escalada jugando en la zona contraria con Archibald anotando y cargando de faltas personales a los jugadores contrarios 51-46, minuto 29.
El Unicaja le había endosado un parcial de 0-7 y dejó sin anotar al Lietuvos Rytas durante cuatro minutos. Esperanzador panorama para un equipo cajista más entero 58-55, minuto 34, aunque de nuevo todo el trabajo realizado acabó cuando las ideas no fluyeron y el conjunto lituano aprovechó los errores del contrario y a pesar del último acercamiento se hizo con el triunfo 70-65.