El futbolista Paolo Maldini, procesado por "espionaje impositivo"
- Podría haber pedido ilegalmente información fiscal sobre otra persona
- También le acusan de acceder al sistema de la Agencia Tributaria italiana
- El exfutbolista se retiró en 2009 y no se ha vuelto a dedicar al fútbol
El exfutbolista de la selección italiana y del AC Milan, Paolo Maldini, ha sido procesado y acusado por un supuesto delito de corrupción y de acceso ilícito al sistema informático de la Agencia Tributaria de Italia, al haber pedido ilegalmente a la agencia impositiva de su país que investigara a otro hombre.
Según la acusación, Maldini habría sobornado a un funcionario de la Agencia Tributaria italiana para eludir los controles fiscales y se habría aprovechado de su posición en el organismo público para pedirle que gestionara transacciones ilícitas de una operación inmobiliaria. Maldini, que niega estas acusaciones, presuntamente habría cometido este delito durante un contrato de una propiedad en Toscana.
La Fiscalía de Milán ya había pedido, en julio de 2010, el procesamiento del excapitán de la selección italiana tras la investigación sobre él y otras 42 personas, entre ellas su esposa, Adriana Fossa, por supuestas prácticas ilícitas para obtener, entre otros, beneficios fiscales favorables.
Imputado por una llamada de teléfono
La investigación a Maldini, llegó tras la interceptación telefónica de una conversación de enero de 2009 con Luciano Bressi, funcionario de la Agencia Tributaria italiana de Milán detenido en junio del año pasado.
En esa conversación, según refirió en su día la Fiscalía, se puede escuchar a Maldini pidiendo a Bressi que le facilite información fiscal sobre Alessandro Paolo Baresi, hermano de dos futbolistas italianos, de cara a una operación inmobiliaria en la que pretende participar junto a éste en la región de Toscana.
La Fiscalía cree además, que Maldini se introdujo de modo ilícito, con ayuda de Bressi, en el sistema informático de la Agencia Tributaria con fines "no institucionales".
El exjugador, de 42 años, se retiró del fútbol en el 2009 después de una brillante carrera. Desde entonces, no ha vuelto a dedicarse al deportes y ha rechazado ofertas para entrenar al AC Milan y Chelsea.