Nadal se proclama heptacampeón en Montecarlo
- El número uno del mundo se ha impuesto a David Ferrer por 6-4 y 7-5
- El mallorquín ha doblegado a Ferrer en un intenso duelo fraticida
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Y a la séptima... volvió a ganar Nadal. El número uno del mundo ha repetido triunfo en el Masters de Montecarlo al imponerse en la final fraticida contra David Ferrer, que cayó con honores por 6-4 y 7-5 en una fiesta para el tenis español.
Ni el buen momento de Ferrer ha podido acabar con la hegemonía del tenista mallorquín. No hay quien tosa al rey de Montecarlo, que impuso su fuerza con la derecha y aprovechó bien los errores con el revés de Ferrer, que apretó al máximo las tuercas a un Nadal dudoso en el servicio, pero más acertado en los puntos decisivos del partido.
El de Manacor manejó bien los tiempos y piso el acelerador con sus 'drives' cuando Ferrer amenazaba con llevar la iniciativa del partido. El alicantino, que no había perdido un partido en tierra este año, arrancó muy agresivo y forzó dos bolas de break en el primer saque de su rival, pero Nadal solventó la incidencia con dos derechazos inapelables.
La osadía de Ferrer despertó a Nadal, que sí rompió el servicio en un tercer juego impresionante, trufado de buenos golpes y dejadas fantásticas desde ambos lados de la red. El campeón había subido una marcha y Ferrer tuvo que sacar su conocida casta para impedir que el partido se rompiera demasiado pronto. El alicantino respondió en el cuarto juego y niveló el marcador con buenos restos y una bandeja sensacional.
No parecían cómodos con su servicio ninguno de los dos y Nadal firmó su segunda rotura en el quinto juego (3-2). Una ventaja que asentó en la siguiente manga tras un larguísimo intercambio de golpes que comenzó liderando Ferrer 0-40 pero que Nadal levantó al aprovechar los fallos en el revés cruzado de su rival.
Ferrer echa el resto
Desde entonces, Nadal mantuvo una mayor serenidad en su servicio y se llevó un primer set muy trabajado que Ferrer siguió complicando hasta el último juego. El de Xávea continuó con esta tendencia al comienzo del segundo set, que repitió los designios del primero, con la rotura de Nadal en el tercer juego.
Ahora sí, Nadal parecía más seguro en su servicio y Ferrer acusó un bajón que parecía definitivo. Sin embargo, el tenista alicantino tiró de reservas y logró romper el saque a su rival, devolviendo el interés a un choque con amplias dosis de intensidad.
Ferrer se vino arriba con el 4-4 y su saque le puso por delante. Nadal, sin embargo, no dejó que el partido se le fuera de las manos y le dio la vuelta a la tortilla, ganando su servicio y rompiendo de nuevo a su rival. 6-5 y juego decisivo para el número uno del planeta, que, como en todo el partido, tuvo que levantar un desempate al incansable Ferrer para coronarse, por séptima vez consecutiva, Rey de la tierra batida de Montecarlo.
Es el primer título de Nadal desde que ganó en Tokio en octubre, el número 30 sobre tierra batida, y el 44 de su carrera. Además, su primer título del año sirve para romper su propio récord en torneos Masters 1.000 al lograr el 19 en esta categoría.