Mourinho no dirigirá a los suyos en el partido más importante de la temporada ante el Barça
- La UEFA prohibe al técnico blanco dar instrucciones telefónicas al banquillo
- El Madrid podría salir de inicio con el mismo ataque que encajó el 5-0
- Si gana el Barça establecerá un récord de victorias en Europa como local
- Barcelona - Real Madrid, en directo, a las 20:30 en La1 y RTVE.es
Aunque el entrenador del Real Madrid, José Mourinho, no se sentará en el banquillo del Camp Nou para dirigir a su equipo, está claro es que el portugués va a ser el centro de todas las miradas y eso que lo que se juega es un decisivo partido de vuelta de semifinales de Champions. [Barcelona - Real Madrid, en directo, a las 20:30 en La1 y RTVE.es]
Si hay algo que sabe el portugués es captar la atención. Desde su llegada al Real Madrid siempre ha afirmado que “atraigo la presión sobre mí para liberar a los jugadores”, aunque en esta ocasión la bomba que, por lo general, suponen sus declaraciones ha terminado explotando.
Al conocerse que se disputarían cuatro Real Madrid - Barcelona en 18 días los aficionados esperaban disfrutar de una exhibición futbolística sin precedentes.
Al final, lo que ha tenido lugar es un espectáculo mediático en el que los dos principales clubes de España han recrudecido su rivalidad, dejando a un lado lo puramente deportivo y manchando su imagen ante los ojos de todo el mundo.
En las últimas horas, el fuego cruzado se ha intensificado. El segundo entrenador madridista, Aitor Karanka, con mayor protagonismo debido a la expulsión de Mourinho, ha declarado que el partido queda en segundo plano debido a una actitud de la UEFA que cree favorable para el Barça. Por su parte, uno de los jugadores con más peso en el Barça, Xavi Hernández, se ha mostrado muy crítico con la actitud del Real Madrid hacia el equipo azulgrana. "La actitud del Madrid es patética", ha asegurado sobre la denuncia blanca ante la UEFA.
La expulsión de Pepe y Mourinho en el Bernabéu, las acusaciones de favoritismo hacia el Barça del portugués, el expediente disciplinario de la UEFA, las denuncias cruzadas entre Real Madrid y Barcelona... han sido las noticas durante los últimos días y aunque el máximo organismo del fútbol europeo ha desestimado las reclamaciones de ambos clubes el fútbol ha quedado apartado y la dignidad y el señorío de ambos clubes, en entredicho.
Mou, aislado de los suyos
Mourinho, siempre polémico y orgulloso de ello, fue el que prendió la mecha de esta batalla dialéctica, que ha terminado con denuncias entre ambos. Además, lo hizo de tal forma que hasta Pep Guardiola, generalmente cauto, mordió el anzuelo y declaró que “Mourinho es el puto amo”. Sin embargo, ahora el portugués tendrá que vivir el partido decisivo en un segundo plano.
Este lunes, ya cedió la palabra a su segundo Aitor Karanka, pero su expulsión en la ida supone mucho más que no dirigir a los suyos frente al Barça en el Camp Nou.
Las normas de la UEFA le prohíben dar la charla técnica previa al partido pero además también le impiden comunicarse por teléfono con Karanka.
Mourinho, como ya ocurrió en la fase de grupos contra el Auxerre, no podrá dar instrucciones al segundo entrenador durante el partido ni por teléfono ni 'sms'. Tampoco podrá acceder a los vestuarios durante el descanso, aunque una vez finalizado, el portugués puede bajar a estar con los suyos, eso sí pasados 15 minutos desde el pitido final.
Después, la UEFA sí le permite dar la rueda de prensa posterior, aunque el Real Madrid no ha desvelado si Mourinho se sentará ante los medios de comunicación.
Verá el partido desde un palco
Tampoco está claro desde donde presenciará el portugués el partido. Por razones de seguridad, Barcelona y Real Madrid deben ponerse de acuerdo sobre su ubicación y las opciones más probables son el palco de autoridades o uno de los palcos privados del Camp Nou.
Lo más fiable para su seguridad es que Mourinho esté en el palco de autoridades ya que desde ahí tiene acceso directo al vestuario, una vez que finalice el partido.
La otra opción, la de los palcos privados, también cobra bastante peso, aunque en algunos de ellos no hay cristales por lo que el portugués tendría que soportar a la hichada culé, que seguramente no le recibirá de muy buena gana.
La remontada, posible
La actitud de Mourinho también ha sido reprobada por los principales entrenadores europeos.
Tanto Wenger como Ancelotti han negado una conspiración a favor del Barça, mientras que el seleccionador de Suiza, Ottmar Hitzfeld, ha señalado que el portugués estaba "destrozando la imagen del Real Madrid" tanto por sus declaraciones como por sus planteamientos.
Y aunque es cierto que el sistema de juego elegido por Mourinho en el Bernabéu no gustó ni a Cristiano Ronaldo, los blancos todavía tienen opciones de clasificarse para la final de Wembley.
Necesitan ganar por dos goles o más, algo que ya han hecho en siete ocasiones en el campo del eterno rival. Así pues, la remontada épica madridista no estaría tan lejos. De hecho, la última vez que Real Madrid consiguió la Copa de Europa (2002) fue tras eliminar al Barcelona en su casa por un 0-2.
Un ataque ofensivo pero goleado
La tarea no será fácil, pero el portugués sacará un once netamente ofensivo. Mourinho levanta el castigo a su compatriota y junto a Cristiano Ronaldo alineará a Di María y Özil a los que se unirán Adebayor o Benzema. Toda la eficacia goleadora del Madrid desplegada sobre el césped con el fin de pasar la eliminatoria.
Y aunque con estos mismos atacantes (sin Adebayor que aún no estaba en el equipo) el Real Madrid encajó un 5-0 en el partido de liga ante el Barça, Mourinho espera cambiar el guión de aquel encuentro.
Destacadas bajas en el Barça
Para ello cuenta además con las importantes bajas del FC Barcelona, que deberá apostar por una defensa poco habitual (podría ser Alves, Mascherano, Piqué y Puyol) para intentar mantener su portería a cero. A la duda de Iniesta, se une la baja segura de Milito que no estará por una rotura muscular.
Pero si en el Madrid recuerdan sus remontadas históricas, en el Barça se acuerdan más de las últimas visitas, ya que en los tres últimos partidos en el Camp Nou los blancos no han conseguido hacer ni un gol ( 2-0, 1-0 y 5-0).
Además, el conjunto azulgrana cuenta nueve victorias consecutivas en Europa como local, y si consigue la victoria instaurará un nuevo récord.
El árbitro y Mou, viejos conocidos
Por otro lado, la sanción de la UEFA a Mourinho también le impedirá verse las caras con Frank Bleeckere, el árbitro encargado de pitar el encuentro, y uno de los señalados por el portugués de favorecer al Barcelona.
El colegiado belga, que pitó la última semifinal entre el Barça-Inter la temporada pasada, dejó al Inter con uno menos por la expulsión de Motta en el minuto 27. Pese a que el conjunto de Mourinho se clasificó, el portugués siempre se quejó de la actuación arbitral interpretando que pitaba a favor del conjunto culé.
Así pues, el entrenador madridista no estará feliz con esta designación, pero en esta ocasión no podrá discutirle sus decisiones desde la banda.
Esta noche se afrontan los últimos minutos de los Barcelona - Real Madrid de esta temporada. Unos partidos en los que ha habido de todo y donde el fútbol casi ha quedado relegado a un segundo plano.
Ojalá que en esta ocasión ocurra todo lo contrario, que se vea un espectáculo deportivo y que el fútbol español vuelva a brillar como se merece, no solo por tener a un representante en la final de Champions, sino porque la vuelta de esta semifinal haya sido una exhibición de "fair play".