El Maccabi se fija como objetivo romper el rebote madridista
- "Con ello romperemos su capacidad ofensiva", ha dicho David Blu
- El Macabi estará arropado por 5.000 seguidores en el San Jordi
- Sigue en directo la Final Four desde este viernes 6 en TdP y RTVE.es
El Maccabi de Tel Aviv, rival del Real Madrid en la 'Final Four' de la Euroliga, viaja a la ciudad condal con unos 5.000 aficionados y concienciado de la necesidad de frenar el rebote madridista en el primer partido para poder pasar a la final. [Sigue en directo la 'Final Four' en Teledeporte y RTVE.es]
El Maccabi, uno de los equipos con más participaciones en las finales de la máxima competición europea -tiene 5 títulos de 13 finales-, acude al compromiso del Barcelona con un equipo relativamente joven y en gestación bajo el mando desde 2010 de David Blatt, exmano derecha del mítico Pini Guershon.
"Nuestro objetivo debe ser romper el rebote del Real Madrid y con ello su capacidad ofensiva", ha afirmado el pivot macabeo David Blu en declaraciones al Yediot Aharonot, antes de iniciar el viaje. El diario destaca que una de las ventajas del Macabi es la experiencia de su entrenador en varios países europeos (Italia, Grecia, Turquía y Rusia), que avala el título campeón del mundo en 2007 con la selección rusa y el haber estado en varias Finales a Cuatro, como asistente de Guershon.
“Tengo alguna ventaja frente a Molin, pero no es tan grande“
"Tengo alguna ventaja frente a (Emanuele) Molin, pero no es tan grande. A Molin le corresponden buena parte de los éxitos de (Ettore) Messina", asegura sobre el famoso técnico italiano. Pero el entrenador macabeo desestima que a nivel de juego en el parqué su equipo tenga alguna ventaja, porque "el Madrid es un equipo con mucha profundidad, agresivo y con una gran capacidad ofensiva".
"Combina jugadores experimentados con jugadores jóvenes que saben mucho de baloncesto y desde el punto de vista de sus componentes es un equipo construido para estar en la Final Four, si no más", agrega.
Estarán arropados por 5.000 aficionados
El último entrenamiento, este martes, a puerta cerrada, lo dedicó el Maccabi a los aspectos anímicos y a concienciar a sus jugadores de que pueden llegar a la final del domingo, que fue adelantada a petición de los "amarillos", como son conocidos en Israel, porque esa noche comienza una jornada de luto nacional en su país.
Este hecho no ha impedido que miles de seguidores se hayan volcado con su equipo. En las últimas cuarenta y ocho horas comenzaron a salir los primeros aficionados, aquellos que querían combinar la experiencia baloncestista con la del clásico Barca-Real Madrid, y hasta el viernes se espera la llegada de unos 5.000 seguidores.
En lo que los operadores turísticos definen como un "puente aéreo" entre Tel Aviv y Barcelona, numerosos israelíes han viajado sin siquiera tener entradas para el partido del viernes, con la esperanza de comprarlas en la reventa o, sencillamente, estar cerca de los jugadores.