El Real Madrid no puede con el Montepaschi y se conforma con la cuarta plaza
- Los de Molin no han podido contra los italianos, que fueron muy superiores
- Una defensa permisiva y muchas pérdidas de balón le pasó factura al Madrid
- Todas las estadísticas del partido
Ficha técnica:
62 - Real Madrid (11+21+13+17): Tomic (8), Prigioni (1), Reyes (8), Suárez (1) y Llull (23) -equipo inicial-, Mirotic (6), Rodríguez, Fischer (4), Begic (4), Velickovic (7) y Tucker.
80 - Montepaschi Siena (19+17+21+23): Hairston (4), Rakovic (8), Lavrinovic (17), Jaric (2) y Moss (11) -equipo inicial-, McCalebb (10), Zisis (9), Carraretto (5), Kaukenas (8), Ress (4), Michelori (2) y Aradori.
Árbitros: Christos Christodoulou (GRE), Matej Boltauser (SLO) y Eddie Viator (FRA). Felipe Reyes fue eliminado por cinco faltas en el minuto 35 y Rimantas Kaukenas en el 39.
Incidencias: Partido correspondiente a la disputa por el tercer y cuarto puesto de la Euroliga disputado en el Palau Sant Jordi de Barcelona ante unos 6.000 espectadores.
El Real Madrid ha caído derrotado ante el Montepaschi Siena (62-80) en la lucha por el tercer y cuarto puesto de la 'Final Four' de la Euroliga. Tras quince años de ausencia, el equipo blanco se ha tenido que conformar con la cuarta plaza [Todas las estadísticas del partido].
El conjunto de Emanuele Molin no se ha recuperado del varapalo sufrido ante el ante el Maccabi Tel Aviv y no ha tenido ninguna opción de ganar esta final de consolación. El equipo italiano ha sido muy superior al conjunto blanco y ha ido en todo momento por delante en el marcador.
El conjunto blanco no estuvo nada acertado, siempre a remolque de un Montepaschi que supo jugar con el tiempo del partido e incluso se permitió momentos de relajación en los que los españoles pudieron acercarse al marcador. Siempre con el control de la final de consolación en sus manos, Pianigiani le ganó la batalla a su colega y compatriota.
El Madrid estuvo más acertado en el tiro que en la semifinal contra los israelíes, superando incluso al Siena en efectividad en tiros de dos, aunque pagó caro su 1/9 inicial en triples y no supo aprovechar el ser superiores en rebote. No obstante, la clave estuvo en las 19 pérdidas de balón.
Tras la semifinal, Molin lamentó no haber sabido leer correctamente el partid y pagar la inexperiencia. Lejos de aprender la lección, como pidió, sus jugadores volvieron a estar erráticos e indecisos en muchos lances del juego, lo que les sentenció a la derrota y a volverse a Madrid con otro duro resultado en contra.
Tan solo Sergio Llull estuvo a la altura en anotación (23 puntos) y fue el único en pasar de los diez puntos, un lastre considerable. Por contra, los italianos jugaron con más temple y una buena selección de tiro les fue catapultando en el marcador. Liderados por Lavrinovic en la pintura y McCalebb y Moss desde fuera, consiguieron otro tercer lugar a sumar a su historial.
Ya de inicio, Siena se fue diez arriba (2-12) ante la permisividad de la defensa del Real Madrid, que no encontró la fórmula para detener a Lavrinovic y Rakovic dentro ni a la movilidad de Moss y Zisis por fuera, que mantenían las diferencias por encima de los diez puntos sin dar así opciones de remontada.
Eso sí, un buen final de segundo cuarto puso a los blancos cuatro abajo y con la sensación de que una mejora de juego podía meterles en la lucha por el tercer puesto. No fue así y, de nuevo, el tercer cuarto empezaron muy fríos y ya no pudieron atrapar al Montepaschi, que aceleró hasta el final del partido llegando a coger distancias de 18 puntos y poner así el 62-80 definitivo.