Gris despedida para Phil Jackson de la NBA

• "La trayectoria que he recorrido ha sido algo muy hermoso"
• A sus 65 años, el entrenador ha conquistado 11 anillos

El entrenador de los Lakers, Phil Jackson (d), sale de la cancha tras la derrota del equipo ante los Mavericks, en las semifinales de la NBA en el American Airlines Center de Dallas, Texas (EE.UU.).

El entrenador de los vigentes campeones de la NBA, Phil Jackson tuvo una amarga despedida tras la eliminación de su equipo, Los Angeles  Lakers, ante Dallas Mavericks en la semifinales de la Conferencia  Oeste.

Los vigentes campeones ofrecieron una imagen penosa, cayendo por  un contundente 4-0 y decepcionando con su actitud en el último  partido, algo que no debe opacar la brillante carrera del  entrenador.

No era el final que se podría imaginar Phil Jackson, el entrenador con más títulos de la NBA, que después de 21 años de éxitos permanentes vio como su actual equipo, los dobles campeones de liga, Los Ángeles Lakers, eran humillados por 122-86 por los Mavericks de Dallas.

Al margen de lo sucedido en el último partido que ha dirigido, Jackson, de 65 años, se va con la mejor marca de títulos y 1.640 partidos dirigidos de la temporada regular de los que ganó 1.155 y perdió sólo 332, lo que supone un 70,4 por ciento.

Mientras que en la competición de la fase final dirigió 333 partidos de los que ganó 229 y perdió 104, un porcentaje del 69 por ciento.

Con muchos problemas físicos, Jackson se retira como una leyenda  viva de los banquillos estadounidenses. Ganador de 11 anillos, seis  con Chicago Bulls y cinco con Los Angeles Lakers, ha entrenado a  figuras como Michael Jordan, Scottie Pippen, Dennis Rodman, Kobe  Bryant o Shaquille O'Neal.

Con los Bulls se hizo con el anillo los años 1991, 1992, 1993,  1996, 1997 y 1998, mientras que con los Lakers fue campeón los años  2000, 2001 y 2002 y después las dos últimas campañas 2009 y 2010,  pero no podrá revalidar el título.

El nombrado entrenador del año en 1996, actualmente ostenta el  récord de victorias en una temporada regular, 72, cuando lo consiguió  entrenando a los Chicago Bulls con Michael Jordan como principal  figura.

A pesar de haber vivido una mala experiencia como profesional en su último partido, Jackson, elegido al Salón de la Fama en el 2007, afirmó: "la trayectoria que he recorrido ha sido algo muy hermoso, que nada tiene que ver con lo que ha sucedido en el campo".