La Liga de Campeones, el sueño imposible de Maradona
- Maradona no pudo optar al máximo título continental en sus años en Europa
- El astro argentino fichó por el Barcelona en estas fechas, hace 29 años
- Lionel Messi, no tiene el mundial pero opta a su segunda Champions
- Barcelona- Manchester en directo, sábado a las 20:45 en La1 y RTVE.es
- Análisis: Uno a uno de la final de Champions entre Barcelona y Manchester
Las casualidades del destino hacen que, en la misma fecha en la que el F.C. Barcelona pasa sus horas previas a la disputa de la final de la Liga de Campeones, se cumplan 29 años del fichaje de Diego Armando Maradona, uno de los más grandes jugadores en la historia del fútbol y del equipo blaugrana. [Barcelona- Manchester en directo
Llega Dieguito
El 28 de mayo de 1982 Josep Lluis Núñez logró atar, después de muchas horas de dura negociación, a la máxima estrella del fútbol mundial de la época. Así lo recogía al día siguiente la prensa deportiva, aunque los flecos del contrato todavía hicieron que se prolongara un poquito más.
No fue hasta un par de días después cuando el propio Diego Armando Maradona confirmó su pase al Barça, noticia que dio el propio jugador a su llegada a España con la selección argentina. La albiceleste iniciaba así su periplo europeo de preparación para el mundial de España de 1982, en el que Argentina defendía título.
La cifra de la que se habló fue astronómica para la época, 1.200 millones de pesetas, unos 7.200.000 euros, por seis temporadas. Después de jugar el mundial, Maradona llegó al Barcelona para intentar anular el dominio del Real Madrid en el fútbol español y europeo.
Una etapa controvertida
Maradona aterrizó en la ciudad condal con la merecida vitola de ser uno de los grandes de la historia, aunque su paso acabó con más sombras que luces. En la temporada 82/83 el Barcelona de Maradona jugó la Recopa y quedó apeado en cuartos de final por el Austria Viena.
La contribución de Dieguito, como se conocía al entonces genio de 22 años, no fue todo lo buena que de él se esperaba. Una hepatitis lo dejó fuera de combate tres meses. Se lograron la Copa del Rey, y la Copa de la Liga ante el Real Madrid, gracias a sus goles, en especial aquel soberbio tanto por el que fue aplaudido en el Bernabéu.
No obstante, no se logró la Liga, por lo tanto se escapó la posibilidad de lograr la primera Copa de Europa para los blaugrana, y las tormentosas relaciones de Maradona con Udo Lattek hicieron que el técnico alemán fuera defenestrado y viniera el argentino César Luis Menotti, como deseó el ya controvertido astro.
En la temporada 83/84 las cosas no le fueron mejor, ya que le rompieron el tobillo ante el Athletic Club de Bilbao, y se quedó tres meses y medio sin jugar.
Sin la Copa de Europa
Maradona contribuyó al éxito en la Supercopa de aquella temporada, en la que el Barça también fue eliminado en la Recopa. Sucedió en los cuartos de final y el verdugo fue... el Manchester United.
La Liga también se escapó, tampoco se podría optar a una Copa de Europa. Maradona llegó a jugar la final de la Copa del Rey 1984 y fue el principio de su fin en el Barça.
El rival fue, precisamente, el Athletic Club de Bilbao y el argentino agredió a Sola, lo que provocó una batalla campal. Ahí se decidió que Maradona no siguiera en el Barcelona y fue vendido al Nápoles.
En la ciudad italiana pasó siete temporadas y en ella se celebró el pasado mes de octubre el 50 aniversario de Maradona, pero allí tampoco logró siquiera disputar la máxima competición europea. Regresó a España en la temporada 92/93, pero en el Sevilla pasó con más pena que gloria.
Años después volvió a Barcelona, ya como seleccionador de Argentina, para enfrentarse a la selección catalana mandada por Johan Cruyff, otro de los grandes de la historia mundial y blaugrana.
La comparación con Messi
En total, Diego jugó con el Barcelona 73 partidos y marcó 45 goles. Lo tuvo todo en el mundo del fútbol, salvo la Copa de Europa. Con el paso de los años la comparación con la nueva estrella del fútbol mundial y argentino, Lionel Messi, han sido inevitables.
Para muchos viejos aficionados, Diego sigue siendo el "dios" del fútbol y al joven Messi le falta completar una buena actuación cuando juega con la albiceleste. La comparación entre ambos daría para llenar páginas y páginas y, posiblemente nunca se llegaría a una conclusión.
La comparación entre deportistas de diferentes épocas siempre es complicada. Lo que si es cierto es que Messi no tiene el mundial, pero este sábado puede lograr su segunda Liga de Campeones... la Copa de Europa que fue el sueño imposible de Diego Armando Maradona.